Hace un tiempo la justicia sur coreana venía rastreando un gran caso de corrupción, que desbancó a la ex presidenta de ese país, Park Geun-Hye en el llamado «juicio del siglo». Hoy se hizo público uno de los veredictos de una de sus aristas más vistosas.
Se trata del intercambio de favores que protagonizaron Lee Jae-yong, cabeza de facto de la transnacional japonesa Samsung y la ex Mandataria de ese país. Lee fue declarado culpable de sobornos y otros cargos de corrupción motivo por el cual pasará los próximos 5 años en la cárcel.
Samsung es el mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo y el mayor conglomerado familiar de Corea del Sur, cuyas empresas se estima que representan alrededor del 15% de toda la economía del país.
El juez Kim Jin-gond declaró en la corte que «el público está decepcionado de que este tipo de crimen a gran escala causado por las relaciones acogedoras entre la política y los negocios todavía suceda, sigue siendo una realidad».