Pasada las dos de la mañana, tras casi 16 horas consecutivas de trabajo y debate, la Cámara de Diputados despachó al Senado el Presupuesto de la Nación para el año 2016, el que contempla un total neto de y cuyo desglose se presenta en detalle en las 27 partidas presupuestarias que reúnen las asignaciones de financiamiento para el próximo año de la totalidad de los Ministerios y entidades públicas del país.
En esta tercera sesión de la Cámara (el lunes se realizó la discusión en general, en tanto que el martes se inició el análisis de las partidas) se concentró el grueso de la votación en particular, siendo los últimos aspectos la votación de la partida del Tesoro Público y el articulado del proyecto.
Más en detalle, el primer artículo refiere a la descripción del presupuesto de los ingresos y gastos del sector público y de los servicios e instituciones del Estado; en tanto que el segundo describe los ingresos generales de la Nación y los programas de gastos en subsidios, operaciones complementarias, servicio de deuda y transferencias de aportes fiscales a los organismos que aprueban presupuesto en esta ley.
En el tercer artículo se presenta la tradicional autorización para la Presidenta de la República para contraer obligaciones, en el país o en el exterior, en moneda nacional o extranjeras, hasta por US$9.000 millones, por concepto de endeudamiento. Esta es la norma con mayor quórum de aprobación dentro de la ley, requiriéndose 60 votos afirmativos para su aprobación
El resto del articulado contempla normas generales para las operaciones del Estado, entre ellas: que las propuestas o licitaciones públicas sean obligatorias respecto de los proyectos y programas de inversión y de los estudios básicos a realizar en el año 2016, cuando el monto total de estos sea superior a mil UTM; condiciones de información para las transferencias públicas; prohibiciones en materia de arrendamiento o adquisición de edificios para destinación de habitación de funcionarios; normas sobre dotación de personal, reemplazos y provisión de vacantes; obligaciones de información para la Dirección de Presupuestos y otras entidades públicas; cobertura de riesgos financieros y límites para la emisión de bonos que emitan las empresas del sector público; normas sobre avisaje y publicidad; y la entrada en vigencia de la ley, a contar del 1 de enero de 2016.
Del marco recién mencionado, solo hubo un cambio al rechazarse por 10 votos a favor, 72 en contra y cuatro abstenciones el artículo quinto, el que contenía una norma cuyo objetivo es establecer un mecanismo de control adecuado para evitar aumento en la dotación de los servicios públicos, sin respaldo presupuestario permanente. Al respecto, el Ejecutivo expresó su objeción y anunció reserva de constitucionalidad sobre la materia.
Tesoro
La partida del Tesoro Público define para 2016 la proyección de ingresos y gastos brutos, esto es: $37.642.525 millones y US$3.679 millones.
En este ámbito, la Sala ratificó el conjunto de materias incluidas salvo lo referente a las transferencias al sector privado, específicamente, lo referido a la bonificación forestal del DL 701, en señal de protesta por la colusión del papel higiénico. Pese a ello, el efecto será nulo, dado que, según indicó el Gobierno, el rechazo solo podría afectar los gastos variables de la asignación, lo que en este caso no ocurre, al corresponder a dineros comprometidos por una ley.
Respecto de la partida, el Gobierno detalló durante el trámite legislativo previo, que respecto de los Ingresos Generales de la Nación, se toma como base las proyecciones de la última recaudación observada y la última proyección realizada, asimismo considera la recaudación completa del año 2014, la operación renta en términos generales y la recaudación que se tiene en todos los subtítulos hasta el mes de julio o agosto del año en curso.
Se especificó que, según las proyecciones para el cierre de este año, se constata que se está en el año más deteriorado en términos de ingresos, pese a que las tasas de crecimiento sigan siendo positivas. Sin embargo, se destacó, la merma en los ingresos genera una base más baja, lo que hace concluir que la recaudación total agregada para el año siguiente también será baja.
El Ejecutivo explicó que los supuestos macroeconómicos relevantes que marcan el presupuesto considera las siguientes variables: un PIB de un 2,75%; una demanda interna de un 2,00%; un IPC promedio de un 3,80%; un tipo de cambio a 700 pesos; un precio del cobre a 250 centavos de dólar la libra; y un precio del molibdeno de 8,20 centavos de dólar la libra
Se precisó que existen algunas variables macroeconómicas que afectan de manera específica a ciertos componentes de los ingresos. Así, en el caso del Impuesto a la Renta, se detalló que el componente más relevante es la variación del PIB real del año anterior y la variación experimentada en el IPC. Ello, porque la producción de las empresas se ve reflejada en el PIB, y porque, sobre esta producción y ganancias, se genera la operación renta, respecto de la cual se pagan los Pagos Provisionales Mensuales. Del mismo modo, se resaltó, los pagos de impuestos y las devoluciones de renta consideran la evolución del IPC del año en curso. Respecto a estas últimas se considera un supuesto del porcentaje de devolución en el mes de abril de cada año (para el 2016 este porcentaje será de un 90%).
El Gobierno informó que hoy los impuestos generales, sin Codelco, representan el 78,0% de los ingresos de este presupuesto. Asimismo, se indicó que los ingresos no tributarios provenientes de movimientos financieros representan el 21,8% y los pagos de Codelco un 0,2%.
En los impuestos consolidados para el 2016, sin Codelco, se apuntó que el Impuesto a la Renta representa un 37,1%; el IVA un 49,5%; el impuesto a productos específicos un 9,0%; el impuesto a los actos jurídicos un 1,8%; el impuesto al comercio exterior un 1,3%, y otros impuestos un 1,3%.
Se comunicó que el total de los ingresos netos por impuestos que se proyectan para el 2016 llegan a $29.308.455 millones, presentando un crecimiento del orden de un 5,1% respecto del año 2015, los cuales se desagregan de la siguiente manera: $10.876.424 millones en impuestos a la renta; $14.501.679 millones en IVA; $2.627.279 millones en impuesto en productos específicos; $535.855 millones en impuestos a los actos jurídicos; $376.409 millones en impuestos al comercio exterior; y en $390.830 millones por otros componentes.
Finalmente, entre otros datos, se distinguió cuatro Programas de Gastos, que incluye a los Subsidios, por $1.048.769 millones; a las Operaciones Complementarias, por $3.327.311 millones; Servicios a la Deuda, por $1.141.594 millones; y al Aporte Fiscal Libre. Este último, se detalló, es la suma de todos los aportes que reciben cada uno de los Ministerios y los Servicios para su operación durante el año.
Adicionalmente, se encuentran los Fondos Fiscales, que consolidan sus operaciones dentro de esta Ley de Presupuestos, que forman parte del patrimonio fiscal. Estos fondos son: el Fondo de Reservas de Pensiones; el Fondo de Estabilización Económica y Social; el Fondo de Educación; el Fondo de Apoyo a Regiones, creado por la última modificación que se hizo a la Ley 20.378, sobre el Subsidio al Transporte Público; y el Fondo de Tratamiento a Enfermedades de Alto Costo, creado por la Ley 20.850.
Cabe recordar que es del Tesoro Público desde donde se entregan las provisiones presupuestarias de gran parte de las reparticiones, ello conforme con las prioridades fijadas por el Gobierno, entre ellas, la entrega de una educación gratuita y de calidad. En línea con lo anterior, se definen los nuevos recursos para los sostenedores del sistema educacional, a partir del mes de marzo de 2016, lo que beneficiará a 2.170.000 estudiantes, a través de las subvenciones prioritaria y preferente, y a 1.654213 estudiantes por el aporte por gratuidad.
Asimismo, respecto de la gratuidad de la educación superior, se destinarán recursos para beneficiar a los estudiantes de familias de los cinco deciles más vulnerables del país.
Otro elemento destacado es la entrada en funcionamiento del Fondo de Tratamiento de Alto Costo, que permitirá financiar los diagnósticos y tratamientos, independiente del sistema de salud al que pertenezcan los pacientes. Además, se fortalecerá el Fondo de Farmacia, para asegurar la entrega gratuita de los medicamentos necesarios para el tratamiento de enfermedades como la hipertensión, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, entre otros; y en la Atención Pre Hospitalaria, se incluirán recursos para el mejoramiento del SAMU y para la adquisición de 95 ambulancias adicionales y la implementación de los Centros Reguladores a lo largo del país.
Fuente: www.camara.cl