Foto: T13
Según información del periodista Mauricio Weibel, desconocidos destruyeron la oficina de César Fuentes, empresario que actuó como proveedor del Ejército en el llamado caso Milicogate.
“Sólo se robaron los documentos que tenía sobre el juicio en el taller mecánico de Independencia, no tomaron dinero ni nada”, declaró Fuentes a El Desconcierto. Y agregó que el jueves pasado ocurrió un robo similar en su local de Vivaceta.
Foto: El Desconcierto
Cabe destacar que durante los últimos meses, Fuentes ha proporcionado a la Justicia una serie de antecedentes sobre facturas falsas que entregó a funcionarios del Ejército.
El conocido Milicogate, consistió en el pago irregular de más de mil facturas fraudulentas de repuestos militares, pero que habrían llegado directo a las cuentas corrientes desde coroneles a cabos, según han confesado algunos implicados.
Fuentes, quien vende repuestos para autos, ha sido el único empresario que habló con la prensa sobre el millonario fraude al fisco, que según informes de la Policía de Investigaciones (PDI) suma un daño al fisco cercano a los 5 mil millones de pesos.
Según las propias declaraciones del empresario, suboficiales de la División de Mantenimiento le solicitaban facturas en blanco y sin timbres de impuestos internos, explicando que eran para «los jefes». Documentos que eran pagados por la Tesorería del Ejército, sin ningún tipo revisión.
Uno de los casos más famoso es el del cabo Juan Carlos Cruz, quien apostó alrededor de 2.400 millones de pesos en el casino Monticello, según confirmaron las investigaciones judiciales en base a informes que entregó la misma casa de juegos.
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