El abogado Floyd Abrams tenía razón cuando describió el ataque contra la redacción de ‘Charlie Hebdo’ como “el asalto más amenazante sobre el periodismo en la memoria viva”. El problema reside en que Occidente olvida sus propios crímenes, subraya el lingüista y filósofo estadounidense Noam Chomsky.
“La razón tiene que ver con el concepto de ‘memoria viva’, una categoría construida cuidadosamente para incluir Sus crímenes contra Nosotros mientras escrupulosamente excluimos Nuestros crímenes contra ellos. Estos últimos no son crímenes, sino noble defensa de los valores más altos”, explica Chomsky la lógica del Occidente.
Chomsky recuerda que en abril de 1999 las fuerzas de la OTAN realizaron un masivo ataque aéreo contra la emisora serbia RTV que resultó en la muerte de 16 periodistas en Belgrado. El portavoz del Pentágono, Kenneth Bacon, dijo entonces en una conferencia en Washington que “la televisión serbia es una parte importante de la máquina de la muerte de Milosevic, igual que su Ejército” y, por lo tanto, un objetivo legítimo de ataque.
“No hubo manifestaciones o gritos de indignación, no hubo gritos de ‘Somos RTV’, no hubo investigaciones sobre las raíces del ataque contra la cultura y la historia cristiana. Por el contrario, el ataque fue alabado por la prensa. El prestigioso diplomático estadounidense Richard Holbrooke, entonces enviado a Yugoslavia, describió el ataque contra RTV ‘de enorme importancia y desarrollo positivo’. Esta idea fue compartida por otros”, escribe Chomsky en un artículo citado por CNN.
“Cuanto más culpamos a nuestros enemigos de algunos delitos, mayor es la indignación; cuando mayor es nuestra responsabilidad en un crimen -y, por lo tanto, cuanto más podemos hacer para ponerle fin-, menor es la preocupación, tendiendo incluso a olvidarlo o a negarlo”, resume el filósofo.
RT / visto en Librered