Los comunistas aún celebran la revolución rusa 20 años después de la caída del Muro. En total se han pedido permisos para celebrar 479 mítines en toda Rusia.- El líder del Frente de Izquierdas, Serguéi Udalzov, ha sido detenido en una manifestación en Moscú.
Veinte años después de la caída del muro de Berlín, políticos, militantes y simpatizantes de izquierdas han salido a la calle en Moscú para conmemorar el 92 aniversario de la revolución de 1917. En la Unión Soviética, la jornada del 7 de noviembre era fiesta estatal, pero en la Rusia postcomunista ha sido sustituida por otra conmemoración nacional, de poco arraigo, el 4 de noviembre.
Con todo, los comunistas siguen las tradiciones y cada año salen a la calle a conmemorar la revolución. Esta vez, ha habido incluso entre una docena y una veintena de detenidos, entre ellos el dirigente del movimiento Frente de Izquierdas, Serguéi Udalzov, aparentemente por intentar manifestarse al margen del itinerario concertado con las autoridades municipales y oponer resistencia a las fuerzas del orden público. Contra Udalzov se ha abierto un expediente administrativo, según la agencia Interfax.
El líder del Partido Comunista de Rusia, Guennadi Ziugánov, ha criticado la política del Kremlin y ha acusado a los dirigentes rusos de haber malgastado 200.000 millones de dólares sin haber creado ni una sola empresa nueva. Ziugánov ha repartido también carnés a los nuevos komsomoles (jóvenes comunistas) y afiliados al partido en un mitin al que han asistido unas 6.000 personas celebrado en las inmediaciones del teatro Bolshói.
En Moscú se han movilizado más de 10.000 agentes del orden. Con ocasión del 7 de noviembre, se habían registrado peticiones para celebrar 479 mítines con una asistencia prevista de 154.000 personas en todo el país, según la agencia Interfax.
DESFILE DE ÉPOCA
Por otra parte, en la Plaza Roja ha habido un desfile militar con trajes y armamento de época en la que han participado cinco mil uniformados para conmemorar el desfile de 1941 en el marco de la preparación del 65 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial.
En vísperas de su viaje a Alemania, el presidente Dmitri Medvédev, ha explicado sus planes de futuro y los del jefe de gobierno, Vladímir Putin, en una entrevista con el semanario Der Spiegel. Haciendo un símil con los dirigentes de la URSS, que presidían las manifestaciones en la Plaza Roja desde lo alto del mausoleo de Lenin, el presidente ha dicho que no le gustaría que él y Putin fueran percibidos en algún momento como «envejecidos dirigentes del Politburo del comité central del PCUS, que salen al mausoleo con los mismos abrigos y gorras» y no es posible distinguirlos a unos de otros.
En caso de continuar «siendo atractivos como figuras políticas para la población», él y Putin, decidirán entre los dos quién se presenta a las elecciones de 2012, para «no estorbar» uno al otro, ha señalado.
P. B./elpais.com/Foto: AFP