La grave situación institucional en la que se encuentra Venezuela ha ido acompañada por una selectiva cobertura periodística que, más preocupada de exaltar el drama que de dar cuenta de los orígenes del mismo, presenta al país caribeño como al borde del colapso. Consciente de ese enfoque, el embajador venezolano en Chile, Arévalo Méndez Romero, montó este jueves una conferencia para los medios de prensa chilenos, en la cual expuso las claves para entender el conflicto de la República Bolivariana “para acercarnos a la verdad”, según expresó.
Acá las pasamos a revisar.
Represión
En ese marco, el embajador señaló que “se dice que el gobierno de (Nicolás) Maduro está reprimiendo marchas pacíficas”, cuestión que desmintió: “en primer lugar, no hay represión. Cuando las marchas son pacíficas como las que convoca el chavismo, muchas de ellas siquiera necesitan presencia policial, porque no ha habido en las fuerzas que apoyan al Gobierno actos de violencia, a excepción del año 2002, cuando se produjo el golpe de Estado”.
Agregó que constitucionalmente “está prohibido el uso de armas letales en las fuerzas públicas en contexto de manifestaciones”. Y ejemplificó esto bajo la imagen de manifestantes irrumpiendo en una base aérea (como se observa en la fotografía) y cómo reaccionó la fuerza pública. “Estos tipos llegaron a la fuerza y no fueron reprimidos; les aseguro que en cualquier otro lugar del mundo lo habrían hecho”, afirmó al respecto.
Oposición armada
A través de un conjunto de fotografías que muestran la presencia de armamento de guerra en manos de manifestantes opositores, el embajador Méndez interrogó: «¿es pacífica una marcha con armamento de guerra?» Luego, agregó: ¿quién provee ese armamento?
Sacando la cuenta del equipamiento de algunos manifestantes, con trajes, casco, motocicleta, etc. señaló que “hay personas con más de 10 mil dólares de equipamiento en las marchas». «¿De dónde sacan ese financiamiento?», se preguntó.
Libertad de prensa e instrumentalización del pueblo
Arévalo Méndez destacó que “todas las movilizaciones están cubiertas por la prensa” y enfatizó frente a las acusaciones que se vierten sobre Venezuela que “eso es distinto de una dictadura”.
Junto con ello -y sustentado en material recopilado de las redes sociales de adherentes a la oposición política al Gobierno- el embajador informó que se acude a “quema de animales vivos para sacar fotos y amenazar a los chavistas. Les dicen que o renuncia Maduro o les harán lo mismo que a esos animales”.
En ese marco, se abordó la situación de colectas en barrios más adinerados, en las que se solicita comida para los menores asistentes, explicitando que se envíe en frascos de vidrio. Incluso, se informó que la oposición acude a facilitar drogas y caramelos a los menores de edad para promover su participación.
Desestabilización y agitadores
Sobre las acciones de violencia, apuntó a que hay algunas de corte más estratégico, de carácter mucho más grave. Arévalo Méndez señaló, apoyado de una imagen, que en Ciudad Bolívar una central de acopio de medicamentos para toda la región y que provee gratuitamente el Estado, fue quemado. “Éste es un crimen imperdonable, es un crimen de lesa humanidad”, señaló.
El embajador se detuvo en el rol de algunos agitadores y activistas políticos opositores, en particular en medios de comunicación. “La voz de comunicadores y periodistas es poder”, afirmó. Se refirió a César Miguel Rondón, sobre quien indicó que “es el hombre más escuchado en las radios venezolanas” y que es promotor de que “embajadas en todo el mundo hayan sido asediadas”.
Por otro lado, Miguel Enrique Otero, hijo de quien rescató los manuscritos de Pablo Neruda, es sindicado por el embajador venezolano como promotor de la iniciativa de lanzar “puputovs” -es decir, bombas fecales- a embajadas y residencias de embajadores.
Otro caso fue el del comunicador Leopoldo Castillo, quien informó que el político opositor preso, Leopoldo López, había sido trasladado de locación sin signos vitales. Luego se desdijo de aquella afirmación.
Situación objetiva de la violencia y algunos casos sobre representados
El embajador Arévalo Méndez precisó que de las 345 comunas que conforman Venezuela, no más de 15 se han visto implicados en acciones de violencia.
Por otra parte, aclaró que a la denuncia realizada por la agencia periodística AFP (Agence France-Presse) de una agresión a uno de sus fotógrafos, tuvo que ser desmentida por la misma.
Objetivos implícitos de la agitación
El representante de Venezuela en Chile, subrayó igualmente que la racionalidad de la iniciativa de desestabilización de la república que representa, sería que “Estados Unidos está detrás del petróleo”.
En ese sentido, sustenta la afirmación señalando que se ha revelado en documentos -a los que tuvieron acceso al ascender al Gobierno- que “la CIA dominaba la plataforma informática y la base de datos de los yacimientos en Venezuela” y que el plan de disponer de tales yacimientos tiene una proyección de 50 años.
Asfixia diplomática
En la misma línea, indicó que “Estados Unidos ha decidido pentagonizar sus relaciones con Venezuela, ello significa militarizarlas”. Una de las ofensivas en que se observa esa hipótesis de cerrar el diálogo a nivel de relaciones internacionales -señala el embajador- es que “desde el Mercosur (Mercado Común del Sur) hay una germinal iniciativa de refundar el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas) y eso no se logra con Venezuela allí. Por eso hay una iniciativa de bajar a Venezuela del espacio”.
Salida constitucional
Frente a la crisis, la propuesta del gobierno venezolano es la realización de una Asamblea Constituyente (AC). Sin embargo, la oposición ha anunciado su declinación de participar, por considerarla ilegítima. Cabe recordar que la iniciativa es presentada luego de que el Poder Judicial impidiera a tres diputados opositores asumir sus labores, al impugnar jurídicamente su elección. Ello significó que la oposición no pudo obtener la mayoría. Por ello se omiten de la AC, “pero sí va a participar el resto del pueblo”, señaló Méndez.
“La Constitución, con el golpe de 2002, quedó insuficientemente blindada”, afirmó luego, motivo por el cual correspondería retomar tal discusión como iniciativa que permita asentar las condiciones políticas para resolver la crisis política.