Cuando se supo que habría un acto en la Casa Rosada, en Buenos Aires, con presencia y discurso de Cristina Kirchner, el mundo político de Argentina se paralizó. ¿Qué diría la actual presidenta ante las malas elecciones del kirchnerismo a nivel nacional y la contundente derrota para gobernador en Provincia de Buenos Aires (distrito que representa el 37% del padrón electoral)?
Foto: Télam
«Le debemos a la ciudadanía no solamente palabras en un debate, sino sinceridad y transparencia y que nadie se disfrace de lo que no es, porque nosotros con nuestros errores, con nuestros defectos, con nuestras equivocaciones, somos lo que somos, pero somos, no somos un día una cosa y otro día otra cosa”, señaló la presidenta, haciendo referencia a las diferencias entre el kirchnerismo y el macrismo.
En su primera aparición después de las elecciones, en las que el Frente para la Victoria (FpV) quedó en primer lugar a nivel nacional pero, sorprendentemente, perdió la provincia de Buenos Aires a manos de María Eugenia Vidal de Cambiemos, frente que lleva a Macri como candiato a presidente, la presidenta dio un discurso que apuntó a la unidad nacional versus a la amenaza de la vuelta de las políticas neoliberales.
Luego de felicitar a Vidal por su victoria en territorio bonaerense y destacar que ya hay 5 provincias que son gobernadas por mujeres (entre las que se cuenta a Alicia Kirchner -hermana del fallecido Néstor Kirchner- en Santa Cruz), criticó a los máximos referentes de Cambiemos por sus cambios de discurso y su reciente reconocimiento de logros del gobierno nacional, a los que antes de la campaña electoral siempre se opusieron.
Al respecto, señaló: “Yo creo que los debates deberían ser acompañados además con versiones fílmicas de posiciones anteriores. Porque no sería honesto intelectualmente decir ‘hoy estamos de acuerdo con todo’ cuando hace apenas meses atrás se estaba en desacuerdo en todo”
“En estos años se promulgaron 867 leyes, no nos han votado ninguna. Hoy nos dicen que no van a privatizar Aerolíneas Argentinas, pero están los documentos fílmicos de cuando decía que la iban a privatizar. Hoy leía declaraciones del segundo miembro de la fórmula (por Gabriela Michetti, candidata a vicepresidente) diciendo que se había arrepentido de no haber votado el matrimonio igualitario y yo digo: y si llegara a ser vicepresidenta, ¿también después se seguiría arrepintiendo de hacer cosas y nos diría a los argentinos ‘me arrepiento de tal cosa’?”
“Lo único irreversible es la conciencia en la sociedad de que hay que luchar por mantener los derechos alcanzados, si se cambian las políticas macroeconómicas, si se hace lo que decían los que propusieron pagar al contado y sin chistar el fallo del juez Griesa, ¿cómo estaríamos?”, enfatizó Cristina Kirchner.
Luego, llamó a pensar al pueblo de cara al próximo balotaje y el debate que se dará de cara al próximo 22 de noviembre. «Yo quiero que reflexionen, yo sé que muchas veces la confrontación, la discusión, el debate no les gustan a todos y piensan que se pueden obtener las cosas sin debatir y sin confrontar. Argentinos, no nos asustemos del debate y la confrontación en tanto y en cuanto podamos hacerlo civilizada y democráticamente. ¡Qué más hermoso que discutir y debatir un modelo de país! O qué quieren, ¿el consenso y el silencio de los cementerios que teníamos durante la dictadura?», expresó.
¿Será la figura de Cristina Kirchner suficiente para poder revertir el mal resultado de las elecciones nacionales? Al respecto, Daniel Scioli, candidato a presidente por el FpV, señaló que «El mensaje de ayer de la Presidenta fue muy claro y contundente. Convocó a la militancia, que es el corazón de los que defienden estas ideas y estas propuestas. Fue un respaldo claro y contundente», desmintiendo una mala relación entre ambos.
¿Podrá el kirchnerismo conservar el poder en Argentina?