Se reunen en Templo y no en Iglesia, en sus tenidas visten trajes especiales y en la vida pública, algunos humita. El rol que han desepeñado en la historia de Chile no es menor, siendo gran parte de los presidentes que ha tenido este país, miembros de la hermandad, algunos de ellos, ensueño.
Igualmente hay curas en sus filas y sus casas de «pensamiento» de Arica a Punta Arenas no son menores. Ligados históricamente al partido Radical en Chile -que de Radical poco le queda- se enfrentan a un momento en que su intelectualidad ha pasado, en muchos casos, a servir al modelo del mercado acentuando la desigualdad y la injusticia. Elementos que se contraponen a la Francmasonería.
Y es que nuestra masonería a la chilena, mientras se mantenga dependiente de ritos de Logias extranjeras, no avanzará. Y que tome otro camino se ve complicado, pero no imposible, puesto que cuando se fundaron logias locales de espíritu libertario éstas no eran reconocidas y por tanto eran declaradas como irregulares.
No debemos olvidar tampoco que aquellos «iluminados» que lucharon y promovieron la «independencia» de nuestra Latinoamerica del dominio español, (Miranda, Cadiz….etc) no hicieron otra cosa que cambiar el orden del tributo al dominio inglés, el que bajo tela norteamericana anexando Estados en una bandera, se expandiría soterradamente sobre tierras al Sur extendiendo el imperio.
Se conformarían los Estados Naciones de América del Sur, caería el virreinato del Perú, pero luego vendrían las conspiraciones, las muertes por la espalda, y dando un salto en los años, los Bancos Centrales y otra serie de instituciones que dejarían nuestros anhelos de ser naciones libres en recuerdos, de que «los viejos tiempos fueron mejores».
Tal vez nos equivoquemos, pues ni iniciados ni regulares somos, así que por el momento los dejamos con un comunicado de la Gran Logia de Chile y sus elecciones próximas a suceder donde la presencia del espíritú de Francisco Bilbao esperamos traiga la toma de conciencia oportuna a esta institución.
El Ciudadano
EL SÍMBOLO PERDIDO DE LA MASONERÍA CHILENA
El éxito editorial de Dan Brown, no es casualidad. A su genialidad creativa, se suma el interés de todos los sectores de la sociedad por lo que hace la masonería al interior de sus templos. Nuestro país no es la excepción.
Por espacio de varios años, este selecto grupo de destacados hombres, no ha contado con una dirección que nítidamente refleje el componente intelectual que hay en sus filas. Los problemas de la universidad de La República, que salpicaron al propio Juan José Oyarzún y las vinculaciones de muchos de sus integrantes en casos de irregularidades han dañado su imagen.
En las próximas horas, este influyente grupo, elegirá su Gran Maestro. En esta oportunidad, el ex rector de la Universidad de Chile, Luis Riveros, y el actual directivo, Juan José Oyarzún, buscan dirigir los destinos de la masonería chilena.
La postulación del ex rector Riveros, es un claro intento de recuperar el liderazgo intelectual que siempre ha tenido este grupo. Cercanos a la institución no desconocen los meritos humanos de Oyarzún, pero son enfáticos en señalar la importancia del perfil de excelencia intelectual que debe regir a esta orden.
Sin duda los masones chilenos están en la búsqueda del símbolo perdido. En este caso, se trata de perfilar una conducción que pueda retomar su participación en los grandes temas del país, en las comisiones de gobierno y en las diversas actividades en donde la excelencia de los masones, los ha hecho famosos.
Sin duda, el tema no es menor. En una sociedad secreta en donde grandes maestros han sido figuras relevantes del quehacer nacional, los masones chilenos buscan retomar una línea que perdieron hace muchos años. En las próximas horas, los medios de comunicación y el país, sabremos que esperan de si los masones…
Termina el comunicado.