En ese contexto, el parlamentario radical expuso esta semana ante la Comisión los principales antecedentes y motivaciones de este proyecto que fue presentado en diciembre de 2013.
“La escasez de agua no sólo es un problema del norte de Chile. En todo el mundo los recursos se agotan de forma inexorable y tener soluciones es urgente. Por eso espero que la tramitación de este proyecto no se dilate en exceso, porque ya hemos esperado bastante para que comience esta discusión”, afirmó.
La moción legislativa establece la obligatoriedad a las empresas mineras cuyos proyectos utilicen más de 150 litros de agua por segundo, para utilizar agua desalinizada marítima para hacer funcionar sus plantas de explotación, extracción y producción. Actualmente existen algunas que operan voluntariamente en este sentido, como las mineras Michilla, Escondida, El Abra y Codelco en sus divisiones Radomiro Tomic y Chuquicamata