Luego de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pusiera un veto sobre una ley que permitía a las víctimas del atentado del 11 de septiembre de 2001 demandar a Arabia Saudita en tribunales nacionales por sus supuestos vínculos en los ataques que sufrió World Trade Center ese día, el Senado de su país frenó la medida.
Esto representaría la primera anulación de un veto presidencial desde que Obama llegó a la Casa Blanca.
La semana pasada el presidente estadounidense vetó el proyecto de la llamada «Ley de Justicia contra Patrocinadores del Terrorismo (JASTA, por su sigla en inglés)» argumentando que desgastará la doctrina de la inmunidad soberana y expondría EE.UU. a demandas procedentes de todo el mundo.
Los partidarios del proyecto de ley afirman que el argumento de Obama es endeble porque EE.UU. «no está involucrado en la actividad terrorista internacional» y «no tiene que temer la venganza de otro país», aseguró el representante demócrata Jerry Nadler. Por eso votaron en contra del veto por 97 votos a favor y uno en contra.
La Cámara de Representantes de EEUU aprobó el pasado 8 de septiembre por unanimidad el proyecto bipartidista que permite demandar a Arabia Saudita por los hechos del 11 de septiembre de 2001, señalando que es un «imperativo moral» permitirle a las familias de las víctimas obtener justicia por la muerte de seres queridos”.