Los candidatos que se disputan las primarias para ocupar la presidencia de los Estados Unidos juegan hoy otra partida importante en un nuevo «Super Martes». Los estados de Florida (sur), Illinois (centro-este), Missouri, Carolina del Norte (este) y Ohio elegirán a sus representantes preferidos en una jornada que será determinante por el gran número de delegados que quedarán repartidos. Después de hoy, va a ser mucho más fácil sacar una idea en claro de quiénes participarán en la carrera hacia la Casa Blanca.
Los candidatos republicanos Marco Rubio y John Kasich necesitan una victoria clara en sus respectivos estados (Florida y Ohio) para mantener viva su candidatura y frenar a Donald Trump, que por ahora viene siendo el favorito.
El magnate neoyorquino tendría que perder por lo menos en una de estas dos elecciones para que evitar que se consolide su victoria. Aunque un triunfo de los adversarios no bloquearía su ventaja, ésta sí se vería reducida porque disminuirían las posibilidades de obtener la mayoría de delegados para erigirse como candidato presidencial en la convención del partido del próximo mes de julio.
Por parte del Partido Demócrata, Bernie Sanders espera hacerse con el triunfo en Missouri, Ohio i Illinois. Si confirma buenos resultados en estos estados sumiría en una crisis a su adversaria Hillary Clinton, logrando desestabilizándola a pesar de que se espera que la ex secretaria de Estado gane en Carolina del Norte y Florida.
Cifras en mano, Clinton posee 766 delegados del total de 2.383 necesarios para el liderazgo, mientras que Sanders acumula un total de 551.
El voto latino, determinante
Una vez más, la clave de Clinton para superar a su rival será el voto afroamericano y latino que espera conseguir de forma clara en Florida y Carolina del Norte.
En la bancada republicana, también la minoría latina podría tener un rol destacado ya que el senador de Florida, Marco Rubio, hijo de inmigrantes cubanos, confía en este voto para salvar su candidatura. Una esperanza que podría truncarse si parte de los cubanoamericanos de Miami optan por apoyar a Trump.
Por otro lado, el gobernador de Ohio John Kasich, candidato más moderado, enfrenta el reto de ganar las primarias en su estado, donde espera ganar gracias a su popularidad. Si pierde contra Trump, ya ha anunciado que abandonará la carrera presidencial.
Si Kasich gana en Ohio y el senador de Texas Ted Cruz, vence en Missouri, podría ser muy probable que los republicanos lleguen a la convención sin un candidato claro.
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