El 38,4 por ciento de los lectores de El Ciudadano que respondieron una encuesta sobre las reformas del gobierno estiman que no sirven porque no recogen las verdaderas demandas ciudadanas. Un 21 por ciento, en tanto, considera que las reformas son buenas, pero están mal comunicadas.
El gobierno y la presidenta Michelle Bachelet han estado bajo extrema presión desde inicios del año pasado al poner en marcha el programa de reformas. Una presión ejercida desde la derecha que comenzó con la reforma tributaria que se ha extendido con la reforma educacional y ahora se canaliza hacia la laboral. De este modo, la prensa del duopolio ha creado la impresión de que las reformas son malas per se.
El Ciudadano ha querido hilar más fino y conocer desde sus lectores los motivos por los cuales se critican las reformas. A diferencia de la opinión divulgada por la derecha económica y sus medios de comunicación, sólo el 11,9 por ciento de los lectores estiman que son malas por cuanto afectan el crecimiento económico.
El 17,7 por ciento de quienes respondieron considera que las reformas eran buenas en un comienzo, pero que han sido recortadas. Por último, un 10,1 por ciento estima que sólo le sirven a las elites.