«El Contralor se equivocó»: Abogado denunciante tras dictamen por viaje de hijos de Piñera a China

La Contraloría General de la República emitió un dictamen respecto al viaje realizado a China por los hijos del Presidente de la República, Cristóbal y Sebastián Piñera Morel, descartando irregularidades en el hecho de que ambos fueran parte de la comitiva que acompañó al mandatario en el avión de la FACh en su visita a Asia.

En la resolución, citada por La Tercera, se sostiene que el hecho de que los jefes de Estado viajen «con miembros de su familia dentro de sus comitivas (…) es una práctica asentada en nuestro país» y que esta «se efectuó de acuerdo a una costumbre que, a esa fecha, no tenía una regulación específica que permitiera contrastarla con la situación fáctica en análisis».

Respecto de la presencia de los Piñera Morel en una reunión con empresarios chinos, la Contraloría se cuadra con el informe presentado por la Subsecretaría General de la Presidencia, el que argumenta que «tales reuniones no tuvieron el carácter de ‘actividades oficiales’ organizadas por el Estado anfitrión, sino que se trató de actividades no oficiales arregladas por entidades distintas, siendo estas las que determinan a quienes invitar».

Por otra parte, la entidad fiscalizadora cita lo señalado por la Subsecretaría en cuanto a que la inclusión de los hijos del Presidente en el aludido viaje no generó «ningún cargo para las arcas fiscales», concluyendo que «no existiendo utilización de recursos públicos involucrados en materia de alojamiento y alimentación, no existen observaciones que manifestar de parte de este Órgano Contralor».

«El Ejecutivo ha faltado a la verdad una y otra vez»

El abogado Fernando Leal criticó el dictamen, advirtiendo de paso que este «fue filtrado a la prensa» antes de que él y los otros denunciantes fuesen notificados de su contenido.

«No comparto la mirada simplista e ingenua que el Contralor Bermúdez tiene de este asunto, en donde se olvida de diversos dictámenes de la Contraloría General de la República, los cuales han señalado una y otra vez que un funcionario público debe evitar que sus prerrogativas o esferas de influencia se proyecten en su actividad particular, aun cuando la posibilidad de que se produzca un conflicto (de interés) sea solo potencial», apunta Leal, recordando lo establecido en las resoluciones N° 15.183-2007, 14.160-2009 y 13.940-2010.

En ese sentido, el abogado recuerda que la misma Contraloría señaló en el dictamen N° 39453-2010 que «el ejercicio de la función pública no reconoce personas ni individuos que queden al margen de este capital principio, de lo que se sigue que en el desempeño de su función el Presidente de la República debe -por cierto- respetar cabalmente las normas constitucionales y legales que regulan el principio de probidad, observando una conducta intachable y un desempeño honesto y leal de su cargo, las que le imponen, en todas sus actuaciones, hacer primar el interés general por sobre los intereses particulares».

El jurista aclara, además, que lo que ha sido objeto de observación respecto al actuar del Presidente «no es que llevara su familia a una gira de Estado, sino que sus hijos mayores de edad y empresarios y un socio amigo de ellos, realizaran reuniones de negocios con ocasión de esa gira costeada por el erario nacional».

Por otra parte, Leal sostiene que al ente contralor «se le hizo presente también que Chile tiene ratificada la Convención Interamericana contra la Corrupción, y que lo acaecido viola el sentido y alcance de dicho tratado».

Por último, el abogado advierte que «el Ejecutivo ha faltado a la verdad una y otra vez en este asunto, primero señalando que los Piñera Morel pagaron su viaje, cuando en realidad el viaje lo costeó la FACh; segundo, cuando el Presidente dice que tienen las facturas de los costos de estadía de sus hijos, y luego se sabe que eran invitados del Estado Chino; y finalmente, cuando Piñera dice en Twitter que Contraloría estableció que no violaron ninguna norma de probidad administrativa, cuando en realidad se dijo que no había norma que regulara los hechos».

«El Contralor se equivocó y el Presidente Piñera si cree que con esto se borra su mal actuar, se equivoca: los ciudadanos no somos tontos y hace rato tenemos claro cómo actúa», concluye Fernando Leal.