El 6 de septiembre del año 1978 el ahora ministro del Interior y Seguridad Pública, Andrés Pío Bernardino Chadwick Piñera, protagonizó un condenable hecho de violencia política al interior del Campus Oriente de la Pontificia Universidad Católica de Chile, en momentos en que ejercía la presidencia de la Federación de Estudiantes de ese plantel. Chadwick había sido designado para asumir la representación del alumnado y militaba en el gremialismo, movimiento fundado por Jaime Guzmán Errázuriz.
Según describe un documento elaborado por la Vicaría de la Solidaridad, un grupo de 300 estudiantes se congregaron en el patio central del campus para realizar un acto de apoyo a sus pares nicaragüenses. El presidente del Centro de Alumnos de Teología, Jorge Carrasco, “intentó dar lectura a una declaración que repudiaba el genocidio de jóvenes nicaragüenses y rechazaba las violaciones de derechos humanos por parte de los gobiernos dictatoriales de América Latina”, consignó entonces el documento de la Vicaría. Fue ahí cuando los gremialistas entraron en escena, con Chadwick a la cabeza.
“La manifestación, de carácter pacífica, fue bruscamente interrumpida por otro grupo de estudiantes, encabezados por el Presidente de la FEUC, Andrés Chadwick, quienes gritando consignas favorables al General Pinochet, procedieron a agredir físicamente a los alumnos que participaban en el acto, y en especial a las mujeres que conforman la mayoría en dicho centro universitario”, se lee en el informe.
El ataque dejó como resultado un “herido grave y varios con lesiones menores”, se lee en el documento. Incluso, se detalla que un estudiante de primer año de Teología, identificado como Alejandro Álvarez, “debió ser internado en la Posta Central al ser golpeado violentamente en los órganos genitales”. La edición número 53 de la revista Solidaridad también relató los hechos y añadió que el joven fue diagnosticado con “hematomas internos en todo el cuerpo”.
El mismo medio dio a conocer una declaración pública de los estudiantes afectados por las agresiones de Chadwick y compañía. “Fuimos violentamente agredidos por un grupo de estudiantes encabezados por Andrés Chadwick, presidente designado de FEUC (…) Nuestra manifestación fue esencialmente pacífica y se nos respondió con insultos y golpes”, señalaron las víctimas, quienes presentaron en la Posta Central una denuncia por agresión en contra del primo del presidente Sebastián Piñera.
Andrés Chadwick concedió entonces una entrevista a un “diario de la capital”, no singularizado por la revista Solidaridad, en la que manifestó su postura ante eventuales manifestaciones estudiantiles. “Tenemos la firme resolución de reaccionar con igual o mayor fuerza si las circunstancias lo requieren”, aseguró.
El cinismo del ministro
Un episodio ocurrido a 40 años de su “barrida” evidencia la desfachatez del titular de Interior. Luego de que el provocador de ultraderecha, José Antonio Kast, fuera agredido en la Universidad Arturo Prat de Iquique, en marzo de este año, fue recibido por Chadwick en La Moneda.
El ministro del Interior calificó como «un cobarde ataque» lo ocurrido, hecho que -añadió- «repudiamos enérgicamente». «Se trata de una agresión inaceptable y un acto de violencia que debe ser rechazado por todos”, espetó Chadwick.
En ese mismo espíritu, en diálogo con Radio ADN calificó los acontecimientos como “repudiables, condenables de todo punto de vista». «No se puede aceptar que un grupo de matones transformen la acción política en violencia”, declaró.