Con la línea de llegada a escasos metros, Daniel Scioli y Mauricio Macri queman sus últimos cartuchos para la segunda vuelta presidencial. Los contendientes tienen sus agendas repletas de entrevistas con medios nacionales y varias recorridas por diferentes puntos del país. A dos días del debate, los equipos de uno y otro se mostraron satisfechos con los resultados del intercambio. En el rincón naranja creen que lograron asociar a su rival con el “ajuste” y desde el partido amarillo entienden que su líder “generó confianza” en el intercambio.
El sciolismo
En la ciudad de Orán, en Salta, Scioli comenzó a cerrar su última semana de campaña electoral en compañía del gobernador local, Juan Manuel Urtubey; y su par jujeño, Eduardo Fellner. “Quienes se acuerdan del norte en la campaña electoral, son los mismos que por desconocimiento de la realidad del país, prometen pavadas como un puerto en Santiago del Estero”, criticó el candidato a presidente del Frente para la Victoria en alusión a Macri, que hace pocos días, cuando visitó la provincia del norte, mencionó al puerto entre las futuras obras de su plan Belgrano para el distrito.
“Quiero transmitir, desde la esperanza, que no vuelva esa Argentina del ajuste, la devaluación y los condicionamientos. El camino no es sacar los subsidios. En el debate quedaron claras dos posiciones”, señaló Scioli, quien ayer también pasó por Santiago del Estero. Y agregó: “De un lado (Mauricio) Macri, el Fondo Monetario Internacional y los buitres. En cambio, nuestro proyecto está comprometido con los trabajadores, las economías regionales, las pymes y las industrias”. Las palabras del mandatario bonaerense sintetizan el discurso que eligió para el debate. “Se cumplió nuestro propósito de asociar a Macri con el ajuste y cuáles son las consecuencias de ese ajuste”, comentaron en el sciolismo. Los colaboradores del gobernador creen que ese objetivo es “más importante que cualquier gestualidad fallida, como los nervios del principio”.
Según confiaron, Scioli continuará intentando “dejar en claro que la revolución de la alegría es para los fondos buitres, para el poder concentrado y para el Fondo Monetario Internacional. Y que el ajuste se traduce en menos plata en el bolsillo, aumento de precios y baja de salarios”.
En el entorno del candidato aseguraron que comenzaron a recibir desde distintas provincias “un impacto negativo hacia la candidatura de Macri en el interior” después de la contienda que protagonizaron el pasado domingo. Al parecer “lo que en la Ciudad de Buenos Aires se interpretó como más suelto y canchero”, lejos de la capital se interpretó como “soberbio y altanero”. También destacaron que “Macri no pudo responder las preguntas” formuladas por Scioli, un análisis que se repitió desde el macrismo.
Lo que viene
Después de su paso por Salta y Santiago del Estero, el gobernador bonaerense se reunirá hoy con científicos en un hotel porteño. Por la tarde, continuará su gira por San Juan y por Mendoza y Córdoba, distritos en los que el Frente para la Victoria tuvo sus más bajas performances electorales. Para mañana aún no está fijada la agenda, pero se confirmó que el cierre de campaña será en el Museo del Mar, en Mar del Plara, tal vez la ciudad más emblemática para el sciolismo, pero que a la hora de contar los votos dejó un trago amargo para el ex vicepresidente.
El macrismo
“La humildad nos gobierna”, bromeó con Tiempo un asesor de Macri. Hasta ahora los sondeos de opinión dan ganador al postulante de Cambiemos, pero en Parque Patricios prefieren no confiarse. Todos los dirigentes, desde los legisladores a la gobernadora electa de la provincia, María Eugenia Vidal, continúan con las recorridas por los distintos puntos del país y por los sets televisivos.
Federico Pinedo, que el pasado domingo siguió el debate desde la platea macrista, salió conforme con la performance de Macri. “Al principio reaccionó frente al ataque virulento de Scioli. Después hizo un esfuerzo grande por no ser agresivo en lo personal, sobre todo en el bloque de calidad institucional, donde había mucho para decir en contra del kirchnerismo”, comentó el jefe de bloque PRO en la Cámara Baja y futuro senador.
Consultado acerca de la receta para poder festejar el domingo, el legislador puso el acento en “mantener el estado de optimismo de la población respecto del futuro de la Argentina”. Para Pinedo, “Macri logró generar confianza y ahí es donde marcó un diferencial con Scioli.”
Sin embargo, en el macrismo no todo fueron flores para el ex titular de Boca Juniors. “Lo vi demasiado agresivo, más que picante. Fue altanero además. Esa posición que adoptó Mauricio desde el principio Scioli no se la vio venir. Todos esperaban un Mauricio zen y apareció otro mucho más enérgico. Es una estrategia”, resumió un dirigente del PRO.
La semana de Macri
“No hay demasiado para cambiar. Lo que hay es lo que va a ser”, sintetizó uno de los asesores que preparó el debate con Macri. “Mauricio va a seguir en la misma línea, hablándole a la gente”, explicó. “La idea es no meterse en discusiones políticas con políticos. La gente es la que vota y por eso nos dirigimos a ellos”, resumió.
Otro colaborador se inclinó por apostar a lo seguro. “No tiene que hacer nada, sólo esperar que corra el tiempo. Esta semana no va a pasar nada”, dijo. “Macri no tiene que tomar ningún riesgo y navegar hasta el balotaje, pero siguiendo con el mismo discurso que trajo buenos resultados hasta ahora”, afirmó.
Por lo pronto, el jefe de Gobierno porteño suspendió una actividad en Quilmes que estaba prevista para ayer, pero participó en varias emisiones televisivas. Hoy se verá las caras con un vecino que ya visitó en Ezeiza antes de las PASO y atenderá a noticieros del interior y a medios nacionales. Es posible que mañana regrese al Conurbano, aunque aún no está claro el destino. Con seguridad, Macri cerrará su campaña en Humahuaca. “Es un lugar simbólico, del interior profundo de la Argentina. Lo elegimos en representación del Norte, que será el eje de un plan de desarrollo muy importante”, comentó Pinedo.
Fuente: Tiempo Argentino