Harto ha dado que hablar a los medios de comunicación el tema del financiamiento de la campaña de Jackson. El asunto, básicamente se trata de que Max Marambio aportó a la campaña y Esperanza Cueto también lo hizo. Entre ambos, el aporte total es del 3%. Hablando en plata: 10.300.000 pesos.
Pero nada de reservados tenían estos aportes, ya que durante la campaña, Jackson pidió al SERVEL -que es por donde llegaron los recursos de Esperanza Cueto- que se inhabilitaran los aportes reservados en su caso, a lo que la institución le respondió que la ley no permitía esa posibilidad. Esperanza Cueto, al ser consultada por su aporte, accedió a transparentar su donación, para terminar con la condición de reserva del apoyo, y así Jackson cumplió con no tener aportes reservados en su campaña. A esto se suma que los aportes de Marambio y Cueto fueron como personas naturales y no como empresas.
¿Cuál es el problema?
El día domingo, salió publicado en un medio un artículo que catalogaba entre comillas y de manera sarcástica a Jackon de “Independiente” por haber recibido estos aportes de Marambio y Cueto ya que se realizó el ejercicio básico de Marambio = ARCIS (quien está desvinculado de la Universidad del 2012) y, como Jackson en algún momento indicó que no debería someterse la crisis de la Universidad a una nueva comisión investigadora, mal intencionadamente se ha dicho que es porque Marambio (= Arcis) financió la campaña, entonces Jackson debe morir en la rueda para que el tema no se investigue. Ahora, lo que el medio, por extrañas circunstancias omitió, es que Jackson, después de decir que no debía haber una nueva comisión investigadora, dijo que eso se debía a que las comisiones no tenían ningún poder judicial y que en esa problemática debía intervenir la justicia (cosa que es bastante más consecuente y radical que una comisión que, siendo honestos, no sirve de mucho). Por lo tanto, si ponemos el panorama completo, resulta que Jackson, en vez de ocultar lo que pasa en la Universidad ARCIS, lo que está haciendo todo lo contrario.
¿Quiénes sacan provecho?
Entre los críticos más lapidarios de Jackson podemos encontrar a Felipe Kast (Evopoli), quien recibió, como aportes reservados, la no despreciable suma de 217.832.465 pesos y don Jaime Bellolio, quien recibió por su parte 128.166.000 pesos en materia de aportes para sus campañas. Sin embargo, y a pesar de que estos datos ya son de dominio público, han tildado a Jackson de “Inconsecuente”, mientras aseguraban que el joven diputado no se encuentra en una posición muy distinta a la de ellos, en materia de aportes reservados.
Es un poco escandalosa la comparación, dados los hechos, sobre todo y considerando que Jackson, al hacer pública la proveniencia de los aportes recibidos, en estricto rigor, no tiene aportes reservados.
Nota final.
A pesar de lo bizarro de todo este asunto, quisiera destacar el machismo de los medios al mencionar a Max Marambio como el principal financista de Jackson, asumiendo que los aportes de Esperanza Cueto, por ser su mujer, no son de ella, como persona natural, sino de su marido. Cabe destacar que Cueto es la presidenta de “Comunidad Mujer”.