Si la gente se levanta y lucha: hay esperanza, señaló Rigoberta Menchú, premio Nobel de la Paz 1992, durante la inauguración del IV Foro Social de las Américas (FSA).
Hoy, jueves 12 de agosto comienzan más de 300 actividades de reflexión y dialogo relativas a seis ejes de trabajo y los desafíos para América Latina en el nuevo milenio.
Un festival de colores, razas, voces, música y hermandad latinoamericana se dio cita en las calles de Asunción, en una marcha de casi tres horas que inauguró el IV Foro Social de las Américas, que se realiza hasta el próximo domingo 15 en la capital guaraní. Más de 600 organizaciones, movimientos y actores sociales de diversos pueblos y naciones de América están llegando a esta capital y participarán aportando a la reflexión respecto de las luchas que deben enfrentar desde la organización.
Movimientos campesinos, pueblos originarios, mujeres, mineros y jóvenes convergen durante cuatro jornadas a reflexionar, intercambiar experiencias y profundizar debates en torno a las reivindicaciones sociales americanas frente a las amenazas de la economía global y el sistema capitalista.
La marcha, que contó con la presencia de más de 5 mil hombres y mujeres de diversos lugares de América Latina, fue encabezada durante un trecho por Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz 1992 y destacada activista indígena guatemalteca, quien señaló la importancia de los foros sociales en el contexto de las movilizaciones por la tierra y por los derechos humanos de miles de americanos y americanas.
Asimismo, la premio Nobel, se refirió en duros términos contra el golpe de Estado en Honduras y contra los apoyos del imperialismo estadounidense que han obstaculizado el desarrollo democrático en el continente: “Occidente nos dijo que ningún golpe de Estado es legítimo, por eso condenamos la acción y apoyamos el rol de las organizaciones sociales, no podemos permitir enmiendas ni aprobar el golpe de Honduras… es un precedente nefasto en el campo jurídico y un pésimo ejemplo en el campo político”.
Sobre el modelo de desarrollo neoliberal que impera en nuestra región, Menchú señaló que “la explotación de la madre tierra llega a ser un autoexterminio. Nosotros no podemos dominar la tierra, ella nos domina a nosotros, y la gran decadencia económica, política y espiritual que vivimos se debe a que no entendemos nuestra relación con la madre tierra”.
Consignas antimilitaristas, en rechazo a las bases norteamericanas en Colombia; pancartas en defensa de los derechos reproductivos de las mujeres, lienzos en pro de la diversidad sexual y pendones en favor de una reforma agraria integral que democratice el acceso y la propiedad de la tierra, recorrieron las calles de Asunción en un carnaval de alegría y expresión respetuosa pero firme, de las demandas de los pueblos latinoamericanos.
Tambores brasileños, tarkas bolivianas y cantos guaraníes coronaron una masiva movilización que recorrió, en dos horas y 45 minutos, el camino hasta la Plaza del Cabildo donde un acto cultural cerró la jornada de apertura y donde Menchú fue la oradora principal.
Bajo el lema “Otra América es posible”, el IV Foro Social de las Américas, que se realiza en dependencias del Consejo Nacional de Deportes de Paraguay, sigue el camino trazado por los foros realizados con anterioridad en Ecuador, Venezuela y Guatemala.
Por Juan Ortega
Desde Paraguay, Agencia Medio a Medio, RMP (Red de Medios de los Pueblos)
EL Ciudadano