Estudiantes de diversas universidades, entre ellos Sofía Barahona, presidenta de la FEUC y Daniel Andrade, presidente de la FECH, se manifestaron a las afueras del Hospital Clínico de la Universidad Católica denunciando un doble estándar de la institución.
Por un lado, aseguran, la institución no está dispuesta a atender a mujeres que quieren realizarse un aborto producto de una violación, pero por otro no tienen problemas con atender a una persona condenada por una serie de casos de violación: el ex clérigo Fernando Karadima.
“La imagen que se está dando desde la UC es que estamos dispuestos a cerrarle la puerta en la cara a muchas mujeres que están pasando por situaciones difíciles, pero le abrimos la puerta ancha a personas como Karadima que han cometido delitos graves”, enfatizó la presidenta de la FEUC.
Al parecer Karadima habría sufrido un infarto que lo tendría en estado de gravedad.
Esto sucede mientras en la Universidad Católica se prepara un plebiscito para definir una posición sobre el aborto en tres causales y la objeción de conciencia institucional en estos casos.
“El llamado que le hacemos a la universidad es a que sea coherente y que se abra a las mujeres que necesitan abortar en estos días y que no ejecute la objeción de conciencia que actualmente está impulsando el rector Ignacio Sánchez, sino que más bien esto quede a conciencia de cada uno de los doctores”, declaró Sofía Barahona.
Desde la FEUC enfatizan además que se debe atender a todas las personas por igual en el Hospital de la UC, sin hacer discriminaciones arbitrarias hacia las mujeres como está ocurriendo actualmente.