El exdirector de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex, 2012-2016), Emilio Lozoya, llegó a la Ciudad de México extraditado por España, en un proceso que enfrenta acusado por fraude y lavado de dinero en el cobro de sobornos a la constructora brasileña Odebrecht y fue trasladado a un hospital, informó este viernes la Fiscalía.
«El perito médico de la Fiscalía General de la República (FGR), por su parte, realizó la revisión física y médica correspondiente del extraditado y encontró anemia desarrollada y problemas sensibles en el esófago, así como una debilidad general en toda su salud, por lo que propuso su internación en un hospital», informó la institución en un comunicado.
El informe oficial indica que la familia de Lozoya, de 45 años, pidió que un médico particular hiciera también una revisión, «en la que encontró los mismos síntomas».
En razón de lo anterior, el Ministerio Público Federal (MPF) «ordenó su traslado a un hospital, donde permanecerá en calidad de detenido bajo estricta vigilancia policiaca», detalla el comunicado.
Lozoya dirigió la petrolera de diciembre de 2016 a febrero de 2018, durante el mandato del entonces presidente Enrique Peña Nieto, y «llegó a la Ciudad de México a las 00:46 horas de este día (05:46 GMT del viernes)», detalla el informe.
El MPF «le informó ( a Lozoya) que se le estaban ejecutando las órdenes de aprehensión por los casos Agro Nitrogenados y Odebrecht, y que desde ese momento quedaba detenido», detalla la Fiscalía.
Además del caso vinculado a la constructora brasileña, el exfuncionario también habría cobrado sobornos para que Pemex comprara la fábrica Agro Nitrogenados, a la siderúrgica mexicana Altos Hornos de México (AHMSA), con un sobreprecio de 240 millones de dólares, pero considerada «chatarra».
En primera instancia, el extraditado fue trasladado del aeropuerto internacional capitalino al Reclusorio Preventivo Norte, pero el el MPF «ordenó su traslado a un hospital, donde permanecerá en calidad de detenido bajo estricta vigilancia policiaca», puntualiza la Fiscalía.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo en conferencia de prensa este viernes que ignoraba de la fragilidad de la salud de Lozoya.
«No tengo reporte sobre su estado de salud, sé que ya está en un reclusorio de la Ciudad de México, y que van a iniciar las diligencias judiciales al mediodía de hoy viernes», dijo el presidente.
El jefe del Ejecutivo señaló que la detención está «relacionada con el caso de Odebrecht, una empresa brasileña cuyo dueño fue detenido y ofreció informar a cambio de que le redujeran las penas».
Esas confesiones desataron procesos en varios países de América Latina, «y fueron a la cárcel altos funcionarios, pero en México, a pesar de que se hizo lo mismo, imperó la impunidad», subrayó el gobernante.
Fuente: Sputnik
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