El «Nueragate» como se ha llamado al caso del préstamo millonario a la nuera de Michelle Bachelet se ha llevado todas las miradas en estos días. Se acusa de tráfico de influencias al hijo de la presidenta Sebastián Dávalos, quien trabaja en el Gobierno en las funciones Dirección sociocultural. Y por más que el vocero subrogante, José Antonio Gómez haya sido enfático en señalar que el caso no se parece en nada a Penta, el problema acarreado por la nuera y el hijo de la mandataria terminó con las felices vacaciones del gobierno.
Sobre este tema, el diputado por Magallanes, Gabriel Boric señaló -en distintos medios- que este caso debe ser medido con la misma vara que Penta, pues a pesar de no tratarse de la misma figura legal (de hecho el nueragate es un tema entre privados), hay un tema ético que debe enfrentarse. Por ello, recogimos las declaraciones que el ex dirigente estudiantil dio a radio Adn esta mañana.
Boric se refirió a las declaraciones del ministro de Hacienda subrogante, Alejandro Micco quien señaló»que no todo el mundo tiene acceso al presidente del banco» en relación a la reunión de Sebastián Dávalos, su esposa y Andróniko Luksic». Sobre esa declaración, Boric dijo «creo que Micco apunta a la verdad, pues un microempresario no va a tener acceso a un crédito de 6 mil 500 millones, y eso es evidente incluso para el señor Dávalos, a quien se le negó el préstamo en otros tres bancos antes».
Además, el diputado independiente señaló que «hay que mirar más allá de la ley, el estándar ético que hay que exigirle a los funcionarios públicos es en este caso mayor, y como hijo de la presidenta, sin involucrar a la presidenta tiene que tener mas cuidado, ser más diligente. Aquí, claramente hay un tráfico de influencias. Si no hubiera sido él , no le hubieran prestado 10 millones de dólares como a cualquier otro chileno u otra pyme». Sobre la diferencia entre Dávalos y el resto de los chilenos a la hora de solicitar un préstamo bancario, Boric ejemplificó con que en su campaña pidió un crédito a un banco privado por 10 millones y no se lo dieron.
Por otra parte, el ex presidente de la FECh se refirió a la utilización que está haciendo la derecha de este caso. Boric dijo: «Yo no soy parte del gobierno ni pretendo serlo, pero me parece que hay una suerte de desesperación de la derecha que con cero moral tratan de agarrarse de cualquier cosa para empatar el escándalo en el que están metidos con Penta». Además, calificó de muy triste, que Renovación Nacional los acompañe en esa lógica del empate.
Boric considera que no corresponde «involucrar directamente a la Presidenta en los actos de su hijo, él es quien debió tener más cuidado, debiera haber dado explicaciones desde el primer momento, es inaceptable que el ministro vocero (s) este refiriéndose a este tema porque el señor Dávalos no ha dado explicaciones. Lo que yo pido es que juzguemos a todos con la misma vara. No basta con repetir la palabra transparencia si en la práctica todavía no conocemos la declaración de renta y de intereses». A su juicio, no medir con la misma vara estos casos, permitirá «la entrada a una suerte de relativismo moral que termina desprestigiando profundamente a la política y abre la puerta a la corrupción».
Sobre las diferencias entre Penta y Nueragate, Boric dijo que el caso Penta es diferente porque demuestra el nivel de colonización del empresariado en la política, cómo finalmente defienden sus intereses mediante el dinero y entre comillas comprando parlamentarios. Siendo diferentes hay que juzgarlo con la misma vara y si las explicaciones que da no son satisfactorias, tiene que dar un paso al lado.
Boric destacó primero los vínculos del grupo Luksic con la Nueva Mayoría, y nombró a «el ministro Eyzaguirre, el ministro Arenas, la ministra de minería que fueron funcionarios de empresas del grupo Luksic, lo que es legítimo, pero hay permanente vínculo con entrada salida con estos grupos». Además, aseguró que «el grupo Luksic pone huevos en todos los canastos. Si revisáramos los financiamientos en las campañas, veríamos que financió la campaña de la presidenta y también en la derecha . Estos grupos lo que hacen es invertir en política, no caridad. Y después cobran».
«Este hecho no es ilegal pero da cuenta del poder fáctico con que cuentas ciertos grupos empresariales en la política(…) Cómo influyen las relaciones que tienen con el poder independiente quién este gobernando, para llevar adelante sus proyectos y quienes son los perjudicados con eso, son los pobladores» sentenció Boric.
Finalmente criticó la especulación que se hace con los suelos, a propósito de que el préstamo solicitado por la nuera de Bachelet, Natalia Compagnon era para la compra de un terreno en Machalí. Además, consideró innecesario que aun se den cargos en el Gobierno por parentezco, ante ello sugirió que las labores de primera dama deberían ser realizadas por profesionales preparados para ello.