Si en algo innova el líder de la Asamblea Nacional (AN) en desacato y autojuramentado «presidente interino» de Venezuela, Juan Guaidó, y su séquito es en las maneras de pisotear los principios diplomáticos.
Como si se tratara de un parque público al que cualquiera ingresa en un arrebato de locura, la «delegación» que Guaidó designó en Costa Rica osó invadir este miércoles la Embajada venezolana en ese país. Según ellos se trata de una «toma de posesión».
El grupo accionó ante la mirada cómplice del Gobierno de Costa Rica, que se pronunció horas más tarde para «deplorar» el acto y anunciar que enviará una nota de protesta a la delegación que invadió la sede diplomática. Y no, no es sarcasmo.
Eso es, según la administración de Carlos Alvarado, la acción que amerita esta flagrante violación que marca un peligroso precedente.
«Costa Rica deplora el inaceptable ingreso a la sede de la Embajada de Venezuela en Costa Rica, por parte de personal diplomático del gobierno del presidente encargado Juan Guaidó», señaló en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Aunque intente lavarse las manos, el Gobierno costarricense avaló este tipo de actos desde que aceptó y reconoció a María Faría como «embajadora designada» por Guaidó.
Pero, no se pusieron de acuerdo en la estrategia que están aplicando, pues el pasado 15 de febrero San José dio un plazo de 60 días para que el personal diplomático nombrado por el presidente legítimamente reelecto de Venezuela, Nicolás Maduro, abandonara la legación. Sin embargo, Faría no pudo contener las ganas de ocupar su «cargo» y se adelantó.
«Para el Gobierno de Costa Rica tal procedimiento es inaceptable, pues lesiona elementales normas diplomáticas de respeto y confianza de las relaciones en la comunidad internacional, y sobre todo, del derecho internacional», expresaron.
«En este sentido, expresa su enérgico rechazo con la actuación de la señora representante diplomática María Faría, que ha irrespetado el plazo diplomático de 60 días dado por Costa Rica a los funcionarios del gobierno del señor Nicolás Maduro para abandonar el país», acotaron en el comunicado.
Cual ladrones, esta madrugada un grupo de desconocidos ingresó a la sede de la embajada de Venezuela en Costa Rica. El Gobierno de ese país debe hacer cumplir la Convención de Relaciones Diplomáticas y garantizar el funcionamiento y seguridad de nuestro personal e instalaciones
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) February 20, 2019
Un acto de doble gravedad
La abogada venezolana Ana Cristina Bracho recordó que una embajada es una misión diplomática permanente y supone una representación de un país en otro, que se ofrece como anfitrión.
https://twitter.com/anicrisbracho/status/1098238307203538944
En su cuenta de Twitter, precisó que la protección moderna de estos espacios «fue desarrollada en la obra de Hugo Grocio y reglamentada por el Congreso de Viena reunido en 1815, que consagró, entre otros importantes asuntos, los privilegios e inmunidades de los agentes diplomáticos».
https://twitter.com/anicrisbracho/status/1098238582857363458
Ahora, solo queda esperar qué acciones tomará el Gobierno del presidente Nicolás Maduro ante esta arremetida desde suelo costarricense.
https://www.elciudadano.cl/venezuela/grupo-de-asaltantes-invade-sede-diplomatica-de-venezuela-en-costa-rica/02/20/
https://www.elciudadano.cl/venezuela/guerra-psicologica-la-campana-que-busca-facilitar-la-invasion-a-venezuela/02/20/