La cancerígena ‘súper mayoría’ de la que disfrutaban los ultraconservadores en el Parlamento húngaro permitía al Primer Ministro, Viktor Orban, aprobar cualquier tipo de ley sin necesidad de buscar el apoyo de ningún otro partido. Por suerte, esta situación llegó a su fin con el resultado de las elecciones parciales de Veszprem que dan la victoria al candidato independiente Zoltan Kesz.
En las elecciones parciales anticipadas celebradas el pasado domingo en la localidad de Veszprem, Hungría, el partido ultraconservador Fidesz perdió la mayoría de dos tercios en el Parlamento que le había permitido aprobar una nueva constitución sin el apoyo de ningún otro partido político. A partir de la victoria del candidato independiente Zoltan Kesz, Fidesz tendrá que buscar alianzas para sacar adelante sus medidas políticas.
El escaño conseguido por el candidato independiente en Vesprém es decisivo ya que ahora los conservadores contarán con 131 de los 199 diputados, perdiendo la súpermayoría de la que disfrutaba el partido derechista Fidesz desde el 2010.
Según los datos publicados por la comisión electoral, el candidato independiente Kesz reunió el 42,66% de los votos mientras que el candidato de Fidesz, Némedi Lajosra, obtuvo sólo el 33,64%.
Tras su victoria, Kesz declaró que con estos resultados habían «mostrado tarjeta amarilla al gobierno«. «Le voy a decir a Viktor Orban que ya nos hemos cansado de sus robos. Queremos ver un Gobierno que gobierne para los húngaros. Mis amigos, podéis estar contentos hoy porque hemos cambiado las cosas en todo el país con este voto. El pueblo es siempre más fuerte que el poder«, puntualizó Zoltán Kész tras la victoria.