Dilma Rousseff, la suspendida Presidenta de Brasil, está a solo un paso de convertirse en la primera Mandataria destituida de ese país después de obtener los votos necesarios para que deje la presidencia.
Aunque la votación oficial quedó para la mañana de este miércoles, durante el martes en el Senado, 42 de los 81 parlamentarios manifestaron su voto a favor del impeachment. Para la aprobación de la salida de Rousseff, se necesita una mayoría calificada, es decir dos tercios de los senadores que equivalen a 54.
Durante casi 16 horas, 63 de los 81 senadores en ejercicio, se inscribieron para hacer uso de la palabra, con un tiempo de 10 minutos cada uno. Esta intervención era para anunciar las razones de su voto y, lo más importante, si estaban a favor o en contra de la destitución de la primera mujer Presidenta de Brasil. De ellos, 42 dijeron que votarían a favor de la destitución, 18 que estaban en contra del impeachment y 3 decidieron no declarar su posición.
Rousseff, suspendida en mayo a la espera del juicio político en el Senado, está acusada de usar dinero de bancos estatales para aumentar el gasto durante el 2014. La mandataria dice que el dinero no tuvo impacto en los niveles generales de déficit y que fue devuelto por completo al año siguiente.
El presidente del Tribunal Supremo, Ricardo Lewandowski, fijó el inicio de la sesión en la que se celebrará la votación final a las 11.00 hora local de este miércoles, pero todo indica que Dilma Rousseff abandonará el sillón presidencial definitivamente.