En el año 2018 el mundo podría ser dividido por una nueva barrera europea entre el Occidente y el Oriente. El plan ucraniano de desvincularse con Rusia mediante un muro de concreto costará 520 millones de dólares (ocho mil millones de grivnas ucranianas), según cifras otorgadas por el diario ucraniano Segodnya. Aunque Ucrania se encuentra en una crisis financiera grave, el gobierno declaró hoy que el país seguirá con el costoso proyecto en la frontera con Rusia. El paredón se podrá apreciar dentro de cuatro años mas, señaló el primer ministro de Ucrania, Arseniy Yatsenyuk hoy.
“Esto no es simplemente una cuestión de fronteras, más bien es un asunto de seguridad nacional y de nuestra dignidad», dijo Arseni Yatseniuk en un comunicado de prensa cuando se presentó el proyecto. “Está claro que no existe una frontera que puede detener a un ejército, este no es su propósito. La intención es formar la primera línea de defensa para que el ejército regular pueda venir al rescate.”
El “Proyecto Stená” consiste en una muralla de 2,000 kilómetros con una zanja de cuatro metros de ancho, y es parte de un plan de seguridad implementado por el gobierno ucraniano. Según Arseniy Yatsenyuk, la construcción del muro es necesaria para la integración regional con la Unión Europea. El primer ministro señaló que ningún país europeo recibirá a ciudadanos ucranianos sin visa si no hay una frontera segura y contundente contra Rusia.
Yatsenyuk declaró que el Estado ucraniano corre peligro sin una barrera de seguridad y que el proyecto está dirigido contra “el tránsito de armas, materiales radiactivos y la fácil circulación de terroristas”. Según el diario Segodnya, Yatsenyuk también dijo que la UE y el FMI apoyarán con asistencia financiera a la construcción del muro.
“Ucrania se encuentra en la peor crisis financiera en su breve historia de la independencia,” declaró Anders Asplund, especialista del Instituto Peterson de Economía Internacional. “Como consecuencia, la mayoría de los bancos de Ucrania están colapsando. La deuda pública aumenta críticamente y es probable que se duplique a 80 % del PIB este año.”
Durante el último año la moneda ucraniana perdió casi 50 % de su valor y al borde de su colapso económico, el país vive una crisis energética con una inmensa deuda con Rusia.
En septiembre de este año Ucrania comenzó la construcción de la muralla, 25 años después de la caída del muro de Berlín. Según RIA Novosti, el jefe de la Administración presidencial ruso, Serguéi Ivanov, declaró que “la construcción del muro hará imposible la recuperación de las relaciones. (…) Estoy seguro que al final no habrá ningún muro”.
Sandra Segall
El Ciudadano