Ya sólo falta la firma de Piñera y su promulgación para que se convierta en Ley el proyecto que «facilita» el derecho de asociación de agrupaciones que persiguen intereses sociales o culturales, sin fines de lucro.
Junto a ello la ley contempla la creación de un Fondo de Fortalecimiento de Organizaciones de Interés Público que se espera, por lo menos, sea el doble en el presupuesto 2011, respecto al manejado por la División de Organizaciones Sociales (DOS) para estos fines.
El senador Alejandro Navarro expresó que «esta iniciativa es fuerte en organización pero escaso en participación, pues se dan espacios para que se organicen, pero el punto a dilucidar es qué poder de decisión tendrán las organizaciones». Agregó que además, se deben dar los recursos necesarios para que las organizaciones puedan cumplir su rol.
Por su parte, senador Juan Pablo Letelier destacó la iniciativa, pero dijo que es menos de lo que se quería lograr en un principio.
Pronto se vienen entonces los Consejos de la Sociedad Civil y otras pildorillas sólo de carácter consultivo como ha sido concebida hasta hoy la participación ciudadana en nuestro país, mientras tantos ideas democratizadoras como la Iniciativa Ciudadana de Ley que promoviera en su tiempo El Ciudadano, no han sido consideradas en esta esperada Ley trabajada por largos años y que la Concertación no se atrevió cuando tuvo el sarten por el mango. Ahora, las flores para quien sabe cosechar, Piñera.
El Ciudadano
Nota: ¿Crees que debiésemos reactivar la campaña por la Iniciativa Ciudadana de Ley? Escríbenos a [email protected]