“Le dije al secretario general de la Unasur, Ernesto Samper, que le transmitiera a todos los países de América del Sur que yo como presidente de la República no voy a permitir que a Venezuela le pase lo que le pasó a Chile en el 1973”, enfatizó Maduro durante la celebración del 156 aniversario de la Federación, que tuvo lugar en el Parque Ezequiel Zamora en la capitalina ciudad de Caracas.
El dignatario venezolano volvió a rechazar la injerencia de Washington en los asuntos internos del país bolivariano y afirmó que las declaraciones y amenazas de la Casa Blanca no le intimidan.
En este sentido, mencionó el reciente comunicado emitido por el portavoz del Gobierno estadounidense, Josh Earnest, en el que se consideraba herramientas adicionales para encausar a Venezuela hacia una dirección más positiva, para luego preguntar “¿quiénes son ellos?, ¿quién gobierna Venezuela, el Gobierno constitucional que yo presido o Barack Obama?”
Las herramientas de Casa Blanca, adelantó, no son más que las sanciones y apoyos a grupos que pretenden perturbar la paz, prolongar la guerra económica y desestabilizar Venezuela.
Anunció, asimismo, que su Ejecutivo presentará el próximo martes nuevas pruebas y grabaciones “muy contundentes y reveladores” que confirmar la participación de la ultraderecha en la intentona golpista contra el pueblo y el Gobierno venezolanos.
En otra parte de su alocución,aseguró que ya ha llegado el tiempo de la victoria para la nación venezolana y que el imperio no podrá con una Venezuela unida. “se acabó el tiempo de las colonias”, sostuvo.
No obstante, urgió a todos los países miembros de Unión de Naciones Suramericana (Unasur) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) a mantenerse vigilantes ante las conspiraciones y violencias que se levantan desde EE.UU.
Al concluir, destacó que el difunto comandante Hugo Chávez dedicó su vida por la patria, pero la oligarquía no lo entiende y nunca logrará sacar lo que sembró Chávez con emprender guerra económica y psicológica.
Nicolás Maduro anunció el pasado día 12 la desarticulación de un complot golpista para derrocar a su Gobierno y asesinar a funcionarios chavistas, en el que estaban implicados varios funcionarios estadounidenses y dirigentes de oposición ultraderecha venezolana.