La candidata a diputada del Movimiento Autonomista por el distrito 11, Manuela Veloso, quien además es abogada constitucionalista y una de las apuestas feministas del Frente Amplio, explicó en un video publicado en las redes sociales por qué el Tribunal Constitucional (TC) es una institución que distorsiona las mayorías, reforzando las declaraciones de la candidata presidencial del conglomerado, Beatriz Sánchez.
A juicio de la abogada, el TC es una institución que atenta contra la democracia, favoreciendo el conservadurismo de la Derecha por dos motivos: su forma de integración, que “ha generado que la lógica binominal de la política chilena se haya proyectado al TC, ya que los ministros responden a la coalición política que los nombró, lo que se ha evidenciado en casi todas sus decisiones” y porque “esta lógica binominal de decisión de los ministros hace patente que no fallan en derecho, sino que sus decisiones son decisiones fundamentalmente políticas que se visten de argumentos de derecho”.
De esa manera, la profesional apunta que “el Tribunal Constitucional no es un tribunal, aunque tenga ese nombre, sino que es una tercera cámara que puede desechar un acuerdo democrático legítimamente alcanzado al interior del Congreso”, lo que trastocaría nuestro sistema político y la tramitación de leyes.
Estas declaraciones se enmarcan en la discusión que se está llevando a cabo sobre la revisión en esa instancia del proyecto de Aborto 3 causales -aprobado recientemente por ambas cámaras del Congreso-, a solicitud de 11 senadores del Chile Vamos para que el organismo lo declare inconstitucional, requerimiento que fue declarado admisible durante la jornada de ayer. “La derecha siempre ha defendido sus posiciones autoritarias vistiéndolas de ropaje jurídico, pero la verdad es que en Chile el aborto no es inconstitucional, aunque así lo quisiera Jaime Guzmán”, detalló Veloso.
Asimismo, disparó contra la actual composición del organismo, donde destaca la presencia de Cristián Letelier, quien ha defendido en Tribunales a miembros de la DINA, la CNI y al Batallón de Inteligencia del Ejército, y de Marisol Peña, quien fue presidenta del TC durante el 2013, período en el cual causó controversia por su votación contra la distribución de la “píldora del día después” en el sistema público.
En aquella oportunidad, Peña se manifestó públicamente en contra de la interrupción del embarazo, “lo que la inhabilitaría para participar de esta nueva votación, por la causal de implicancia de haber emitido opinión con publicidad o dictamen sobre el asunto concreto que actualmente se somete a conocimiento del tribunal», precisó la abogada. A pesar de ello, Peña no se ha pronunciado al respecto.
Finalmente, la candidata a diputada concluyó que “como país democrático, no podemos seguir tolerando que las voluntades ciudadanas y de las mayorías se vean soterradas por una institucionalidad antidemocrática y guardiana de una Constitución ilegítima. Tenemos que abolir el Tribunal Constitucional, para que las leyes que rigen nuestro país sean tramitadas de principio a fin respondiendo a las necesidades de la ciudadanía y no de una u otra coalición política”, comprometiendo su voluntad y la del conglomerado a ese fin.
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