Onésima Riquelme Lienqueo, es candidata a diputada por el distrito 23 de la Región de La Araucanía. Onésima tiene 38 años, es educadora y psicopedagoga de profesión y activista en la defensa de los derechos humanos de los niños y niñas. Es madre de dos hijos y actualmente vive en el sector rural de la comuna de Nueva Imperial, una de las comunas a las que busca representar como diputada en el Parlamento.
«Hace mucho tiempo que llevamos trabajando en los procesos de vulneración de derechos de niños y de niñas. En la región de La Araucanía se ven los casos más graves de vulneración de derechos de infancia a nivel nacional, tanto en los niños que pertenecen al pueblo mapuche, como los niños que pertenecen al sistema de protección del Estado de Chile», señala la defensora de la niñez.
La fundadora de “Pichi Newen” (“Pequeña energía” en mapudungun), y miembro la Red de Defensa de la Infancia Mapuche: Infancia Libre y Sin Represión explica que uno de los puntos más importantes, y en el que el parlamento y las instituciones públicas encargadas de la infancia parecieran tener carencias, es contar con profesionales capacitados para legislar y desempeñarse en materia de infancia.
«Es fundamental contar con profesionales en el área de niñez y adolescencia que logren garantizar sus derechos dentro del parlamento, pero que a la vez sean un complemento entre el trabajo que hoy la convención constitucional está impulsando referente a reconocer la importancia de la niñez y adolescencia en Chile, basándose en el derecho internacional que los protege«, apunta.
Uno de estos tratados internacionales es la Convención sobre los Derechos del Niño, aprobada el 20 de noviembre de 1989 por la Asamblea General de Naciones Unidas. Chile ratificó este convenio internacional el 14 de agosto de 1990, que se rige por cuatro principios fundamentales: la no discriminación, el interés superior del niño, su supervivencia, desarrollo y protección, así como su participación en decisiones que les afecten.
Sin embargo, gracias a las distintas denuncias ciudadanas y el levantamiento de información de distintas organizaciones no gubernamentales, la sociedad ha sido testigo de cómo se han infringido estos principios de manera sistemática por organismos públicos como el Servicio Nacional de Menores, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
«Los niños y las niñas han sido solamente parte de las propagandas electorales y de los slogans de distintos sectores y gobiernos que han llevado un proceso en el cual no han garantizado los derechos de nuestros niños y nuestras niñas. Apostamos a entrar por ellos y ellas, porque tenemos que defenderlos y porque los niños son el futuro y presente de nuestro país«, sentenció la candidata a diputada por el distrito 23, Onésima Lienqueo.
Para saber más de Onésima Lienqueo, puedes leer su última columna de opinión aquí.
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