Periodismo, Otras Profesiones y el Sagrado Derecho a Comer

En nuestro país, hay más de 40 universidades. En Suecia, hay 4; en Noruega, 2; y así, por la misma hebra. Claro que Suecia fabrica desde un alfiler a un avión, que le hace la collera a los mejores del mundo, pasando por buques de propulsión nuclear, que transportan 3.500 contenedores -21 kms. puestos en hilera, uno pegado al otro- y cualesquiera otras cosas que al lector se le ocurran.
Lo que pasa con los nuevos periodistas en Chile, es impajaritable en todo quehacer, cuando la oferta supera largamente la demanda. Sin importar la calidad del producto. Sobre todo si el país está bajo la tiranía incontrarrestable de un economismo definitivamente indigente de reales valores y parámetros de lo que es hacer y desarrollar Patria y Sociedad, así, con mayúsculas.
Treinta y dos años ha, había en Chile por lo menos el doble de las radioemisoras, el triple o cuádruple de los diarios nacionales y de provincia, varios miles de revistas especializadas, semanarios y quincenarios (como el que tiene en sus manos) de gran peso en la opinión ciudadana. Los periodistas tenían aranceles y el Colegio de la Orden velaba por ello y por los resguardos éticos. En el gran empresariado, había afanes monopólicos, pero disimulados porque esa mezquindad era reprobada en todos los sectores. Y las puertas de los medios siempre estuvieron abiertas a la inteligencia y la cultura… Eran los tiempos en que Chile fue ejemplo de civismo y libertad para todo el mundo, reflejado en un periodismo libre, veraz, valiente y comprometido con su público.