En su visita a Perú, el ex presidente Sebastián Piñera volvió a afirmar que tiene parentesco directo con la sangre del último líder del imperio inca, Huayna Cápac. Esto, después de haberlo señalado en 2011.
Ante los medios, Piñera recalcó que «es verdad. En una visita que hice a Perú, el presidente Alan garcía me sorprendió con esa noticia. Me dijo que yo era descendiente del último emperador inca, Huayna Capac».
El ex mandatario señaló que una hija de Hyana Cápac se casó con un español que se fue a Chile, junto a Pedro de Valdivia, en la expedición. «De esa unión desciende, generación tras generación registrado y documentado, la familia Echenique, de la cual mi madre es una miembro y por tanto, yo también».
Sus dichos han provocado las burlas de los usuarios en redes sociales. Pero no fue lo único a lo que se refirió Piñera, quien también analizó el momento político que vive el país peruano.
«El camino al desarrollo es un camino largo, no bastan 15 años buenos como los ha tenido Perú. Se requieren 30 años para que el Perú logre ser un país desarrollado y sin pobreza. Por lo tanto hoy día el Perú está a mitad de camino», aseveró.
El ex presidente también destacó la elección del Pedro Pablo Kucszynski, asegurando que le ha traído a Perú «una inyección de optimismo, esperanza y confianza». No obstante, respecto a nuestro país, sus conclusiones no son tan optimistas: «Chile está creciendo muy poco y crea pocos empleos. Los grandes problemas de inseguridad y delincuencia se están agravando».
Además, Piñera recalcó que, al término de su gobierno, cuatro de cada cinco chilenos pensaba que Chile iba por un buen camino. «Hoy, dos años y medio después, cuatro de cada cinco chilenos cree que Chile va por mal camino. Es evidente que CHile tiene que cambiar el rumbo», cerró.
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