El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se han reunido este jueves en la Moncloa durante más de dos horas con el desafío del referéndum del 1 de octubre sobre la mesa y el reto de normalizar su relación institucional tras sus desencuentros. Al término de la reunión, el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha explicado que entre ambos hay una «coincidencia sustancial» en declarar «inaceptable» el referéndum y la «violación sistemática» de las leyes. Además, han acordado mantener un contacto permanente sobre este asunto.
El acuerdo entre el Gobierno y el principal partido de la oposición llega hasta la oposición frontar a la convocatoria independentistas, pero a partir de ahí comienzan las divergencias. Sánchez le ha trasladado la necesidad de poner sobre la mesa una «solución política», y también le ha pedido que intente fijar cuanto antes una reunión con el ‘president’, Carles Puigdemont. Según fuentes socialistas, el jefe del Ejecutivo le ha contestado que veía «difícil» llevar a cabo un encuentro de este tipo. En cualquier caso, Sánchez también le ha avisado de que si el Gobierno no toma la iniciativa, el PSOE lo hará, a través de la presentación de «iniciativas legislativas» en el Congreso de los Diputados. «Apoyamos la defensas de la legalidad, pero el Ejecutivo no se puede atrincherar en estas posiciones puramente defensivas», ha explicado tras el encuentro la portavoz parlamentaria de los socialistas, Margarita Robles.
Méndez de Vigo, por su parte, no ha sido muy prolijo en las explicaciones sobre la hoja de ruta del Gobierno para frenar la consulta o sobre por dónde ha discurrido la conversación. Tan solo ha querido resaltar que al Ejecutivo le «congratula» que el PSOE rechace la celebración de una consulta de autodeterminación, que no «se va a celebrar» y menos «a través de una ley suprema» del Parlament, en referencia al borrador de la ley del referéndum.
Según Robles, Sánchez ha trasladado a Rajoy que «siempre va a encontrar» a su partido «en defensa de la legalidad y la Constitución». «Ningún partido democrático puede apoyar ninguna medida que trate de saltarse las leyes y el Estado de derecho», ha manifestado.
EL DIÁLOGO
Pero el secretario general del PSOE, ha continuado Robles, también ha pedido al presidente que «aporte soluciones» y no obvie la vía política para solucionar el conflicto catalán. En este sentido, ha reclamado al jefe del Ejecutivo que active el «diálogo» con la Generalitat y le ha avanzado que su partido presentará iniciativas legislativas en las Cortes para buscar una salida al problema territorial. La portavoz ha evitado concretar estas iniciativas, más allá que tendrán que ver con la financiación autonómica y con su propuesta de una reforma constitucional de corte federal.
Según Robles, Rajoy y Sánchez no han hablado de la posibilidad de aplicar el artículo 155 de la Constitución para mermar las competencias de la Generalitat, pero si el Gobierno decide acudir a este precepto, el PSOE no mantendrá su apoyo. Sánchez es partidario de abordar el problema con «mesura».
Aparte del tema catalán, ambos han abordado cuestiones de índole internacional, el terrorismo yihadista o la necesidad de cerrar el pacto contra la violencia machista, pero no de temas económicos o del techo de gasto de los presupuestos del 2018, que el PSOE no apoya.
Se trata de la primera entrevista entre ambos dirigentes desde que el socialista recuperó las riendas del partido y, según fuentes gubernamentales, ha sido la reunión más sosegada y cordial, dado que en las anteriores, tras el 20-D, estaba en juego quien sería el presidente del Gobierno.