Raúl Castro recibe la Llave de la Ciudad de Montevideo

El que ya fuera presidente de Uruguay entre 2005 y 2010 recogió este domingo el testigo del poder uruguayo de las manos del inigualable Pepe Mujica, el presidente que rompió los récords de popularidad. Raúl Castro fue uno de los mandatarios que acudió a la ceremonia celebrada en el Palacio Legislativo de Uruguay en la que Tabaré Vázquez asumió la presidencia del país latinoamericano.

Durante esta visita a Uruguay, Raúl Castro recibió de las manos de la intendente de la ciudad Ana María Olivera, la Llave de la Ciudad de Montevideo, gesto que, afirmó el presidente cubano, «tiene un gran valor, pues a Uruguay lo queremos con sentimientos profundos«.

Raúl Castro aprovechó el acto de entrega de la Llave de la ciudad para recordar que Uruguay ha apoyado constantemente a Cuba, aún en los peores momentos, motivo por el cual aseguró que ambos paises seguirán «estrechando cada vez más las relaciones«. Fidel Castro también recibió la Llave de la Ciudad de Montevideo durante una visita en 1995.

Ana María Olivera -quien estuvo exiliada en Cuba durante la dictadura uruguaya- apuntó que la entrega de la Llave demuestra la hermanadad existente entre ambos pueblos y señaló que los uruguayos sienten un inmenso amor hacia los cubanos. Olivera recordó durante el acto a los cientos de jóvenes uruguayos que se consiguieron graduar gracias a la Misión Milagro liderada por los gobiernos de Cuba y Venezuela: «De eso mi pueblo no se olvida. Con esta Llave de la ciudad tiene también la llave de nuestros corazones«.

Al final de la jornada del domingo, José Mujica y su esposa visitaron al mandatario cubano en su hotel, «lo que constituyó una muestra de la hermanadad entre ambos pueblos y de la amistad que unen a los dos presidentes«, publica el diario cubano Granma.

A la salida del hotel José Mujica declaró ante los periodistas que esperaban en la puerta que habían estado hablando de «cosas de viejos, de puros recuerdos desde la década del 50, cosas que pasamos y que la mayoría de ustedes ni conoce (…) Estuve dos horas hablando con un viejo amigo. El pueblo cubano es mi amigo, y en cualquier momento viajaré a Cuba«.