Rescate de mineros en Chile y el escondido Royalty tras un Reality Show

Mina San José, Atacama.- El minero Florencio Ávalos se convirtió en el primero de los 33 mineros en salir del fondo de la mina, en la que estuvo sepultado 69 días junto a 32 de sus compañeros.

La operación de rescate comenzó a las 23:21 minutos cuando el rescatista Manuel González descendió al túnel en la cápsula Fénix 2.

La televisión chilena transmitió en vivo las escenas de esta increíble historia. Según el locutor de TVN Mauricio Bustamante, más de mil millones de personas seguían en todo el mundo estas imágenes.

Luego de 16 minutos de un viaje sin inconvenientes la capsula Fénix II llegó al fondo de la mina. Una vez dentro saludo a todos los mineros algunos de los cuales estaban con su torso desnudo. De fondo, una bandera chilena daba el marco a la escena. Luego de las instrucciones del rescatista González Florencio Ávalos se subió a la Fénix II.

En el campamento Esperanza, ubicado a 180 metros del lugar donde estaba la plataforma de rescate, unas dos mil personas seguían por televisión estas imágenes.

Parte de la familia Ávalos seguía por televisión las imágenes en su pequeña tienda de campaña mientras un enjambre incuantificable de camarógrafos trataba de captar imágenes de ellos.

Luego de 21 minutos en el fondo de la mina, el jefe de la operación de rescate Andrés Sougarret dio la orden de alzar la cápsula. Y tras 18 minutos, Ávalos afloró a la superficie.

Se veía bien. Afuera fue recibido por su esposa Mónica Araya y su hijo Byron, de 8 años, quienes los saludaron con emoción y afecto. El presidente Piñera le dio un gran abrazo. Luego de esto, fue atendido por un equipo médico quien cumplía con un protocolo previamente establecido.

Luego de esto fue trasladado al Hospital de Copiapó donde se realizará una labor de acondicionamiento.

Cabe tener presente que la imagen de Ávalos se hizo mundialmente conocida cuando el 22 de agosto –el dio que los 33 mineros fueron avistados- su rostro fue captado por una cámara de vídeo que demostró que los mineros estaban vivos.

Es importante señalar que los mineros no querían ser trasladados al Hospital sino que querían esperar al resto de sus compañeros en la superficie, hasta que el último saliera. Sin embargo, el Ministro de Salud descartó esta posibilidad. “Es altamente inconveniente forzar la situación desde el punto de vista médico”. Su anhelo “no resiste un análisis técnico y moral”.

Pocos minutos después, el Piñera dio un discurso en el que señaló que en la “tal como otras veces Chile se unió en la adversidad”. Aseguró que su Gobierno se preocupará de fiscalizar las condiciones de seguridad, no sólo en la minería, sino que en todas las áreas de la economía.

Consultado respecto de las precarias condiciones de seguridad existente en las minas chilenas, Piñera dijo que se cerrarían las faenas que no cumplan con las condiciones adecuadas. Es importante señalar en este sentido que en los últimos días el Sernageomin ha ordenado la clausura numerosas faenas de pirquineros y pequeños mineros en quienes se ha concentrado la labor fiscalizadora del Gobierno. Según el Presidente del Comité de Defensa del Cobre, Julián Alcayaga, estas acciones buscarían acabar con esta actividad y entregar los yacimientos ocupados por los pequeños mineros a grandes corporaciones.

También es importante destacar, en este sentido, que este rescate ocurre el mismo día que el Senado Chileno aprobaba por 23 votos contra uno y tres abstenciones, un proyecto que prorroga la invariabilidad tributaria desde 2017 hasta 2023, cuando la mayor parte de los más grandes yacimientos chilenos, se encuentren vaciados.

De esto ni Piñera ni los miles de periodistas presentes en la Mina San José dijeron nada. Menos los noticiarios de TVN.

Los operativos de rescate continuarán  hoy, ya van 15 mineros que han visto la luz natural, esperándose que el rescate concluya en las próximas horas, completándose tal vez en 33, el número de la cábala.

Por Francisco Marín

Ilustración: Gentileza de Stephff (Stephane Peray) Editorial cartoonist, Bangkok, Thailand.

El Ciudadano