Hoy día se realizan conversaciones en la capital de Alemania sobre la precaria situación en Ucrania. El presidente de Francia, Francois Hollande, continúa exigiendo que el Occidente levante las sanciones económicas dirigidas contra Rusia. El jefe de gobierno francés participará en la reunión de emergencia que está agendada para el 15 de enero en Kazajstán, donde se unirán representantes de los gobiernos de Rusia, Alemania, Francia y Ucrania, países involucrados en esfuerzos diplomáticos para poner fin al conflicto bélico que se despliega en el sur-este de Europa.
“Se revisará el Protocolo de Minsk y la aplicación de los Acuerdos de Minsk,” señaló Yevgeny Perebeinos, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano, según la agencia de noticias TASS.
La implementación y cumplimento del acuerdo del alto al fuego es vital para la entrega de ayuda humanitaria en la zona. Según el canciller alemán Frank-Walter Steinmeier, la crisis de la población ucraniana podría promover una solución diplomática.
“La obligación humanitaria de ayudar a las personas en el este de Ucrania durante el invierno […] Nos gustaría aprovechar de esta oportunidad», expresó el ministro a la revista alemana semanal, Die Welt am Sonntag. “Lo que realmente necesitamos ahora son más medidas para garantizar la tregua.”
Agregó que el deterioro financiero en Ucrania, tanto como en Rusia, podría ayudar a “relajar” las tensas relaciones y fomentar negociaciones exitosas.
Al mismo tiempo, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) aumentará su presencia monitora en la región, mediante una duplicación de sus observadores en Donetsk. Según la organización, el estado de la seguridad en la zona está mejorando.
A pesar de que las partes llegaron a un acuerdo de alto al fuego en Septiembre, la OSCE reporta que no se está cumpliendo con el compromiso. El canal de radio europeo, RFERL, destaca que más de 1,300 de las muertes en el conflicto se han provocado tras el trato logrado y que se ha visto poco progreso en las negociaciones. Sin embargo, el territorio ucraniano ha visto una disminución de combates en las últimas semanas.
Crisis humanitaria
La ONU y la OSCE han registrado un incremento significativo en el flujo de personas que dejan las repúblicas autoproclamadas por falta de servicios sociales, y que se inscriben como desplazados en el oeste para recibir los beneficios entregados en aquel lugar. La OSCE reportó a fines del mes pasado, que el promedio de personas que salen de los territorios del este llega a aproximadamente 1,600 personas diariamente en los controles fronterizos donde la organización tiene observadores.
Debido a la falta de servicios de salud, medicamentos y alimentos, muchas de las personas que se atienden en hospitales se encuentran en estado de riesgo. La ONU estima que aproximadamente 50,000 personas que sufren de tuberculosis, incluyendo a 8,290 pacientes que viven con TB y VIH, podrían sufrir una interrupción de sus tratamientos durante este año.
La prolongada forma de la crisis tiene efectos colaterales como desplazamientos a largo plazo, algo que pone en riesgo las oportunidades económicas de las personas que han dejado sus hogares en el este. Además, la ONU advierte que la seguridad alimentaria es cada vez más preocupante por la inaccesibilidad económica y una falta general de alimentos en los territorios ocupados por los insurgentes.
Según un reporte emitido por la ONU a fines de diciembre, al menos 4,771 personas han fallecido en el conflicto en el este de Ucrania desde abril del año 2014, y aproximadamente 10,360 personas han resultado heridas. La organización internacional declaró que se cometen violaciones casi todos los días dentro del régimen de alto al fuego.
Aproximadamente 5,2 millones de personas se encuentran afectadas en la zona de conflicto, además unos 610,000 personas están desplazadas dentro del país, una cifra que sigue aumentando, según el informe de la ONU.
Sandra Segall
El Ciudadano