Si el 23 de septiembre sigue sin elegirse un presidente del Gobierno español se procederá automáticamente a la disolución de las Cortes y se pondrá fin a la legislatura para acudir a una nueva cita electoral
El presidente del Gobierno en funciones y líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, no se someterá a una nueva sesión de investidura si no tiene garantizados los apoyos parlamentarios para afrontarla con éxito.
«El presidente se presentará a una nueva investidura si cuenta con los votos que le respalden», dijo este viernes en rueda de prensa la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá.
Pedro Sánchez fue el claro ganador de los comicios generales del pasado mes de abril, pero por el momento no consiguió los apoyos necesarios para formar Gobierno.
En el mes de julio, Sánchez se sometió a una sesión de investidura en la que no consiguió la confianza del Congreso de los Diputados para renovar su mandato.
El fracaso de la investidura se debió a la falta de acuerdo entre el PSOE y su principal socio potencial, la coalición izquierdista Unidas Podemos, con la cual negoció la posibilidad de formar un gobierno de coalición.
En las últimas horas, el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, dijo estar dispuesto a negociar la investidura de Sánchez si se retoman las conversaciones en el punto en el que quedaron en julio.
Esto implica trabajar sobre la última oferta formulada en julio por el PSOE, que ofreció a Unidas Podemos la posibilidad de entrar al Gobierno ocupando una vicepresidencia de carácter social y ostentando las competencias en materia de Igualdad, Sanidad y Vivienda bajo la condición previa de que el propio Iglesias quedase fuera del Ejecutivo.
Aunque Unidas Podemos aceptó el veto a su líder, la coalición izquierdista rechazó la oferta y pidió al PSOE ceder también las competencias en políticas de empleo, algo a lo que no accedieron los socialdemócratas.
Ahora, el PSOE niega la posibilidad de retomar las negociaciones donde quedaron en julio.
«La propuesta de Gobierno de coalición es una propuesta que ya no está vigente, no está encima de la mesa», dijo Celaá.
La ministra portavoz afirmó que el rechazo del PSOE a gobernar en coalición con Unidas Podemos se debe a la «desconfianza» generada por la negociación fallida de julio.
Si el 23 de septiembre sigue sin elegirse un presidente del Gobierno se procederá automáticamente a la disolución de las Cortes y se pondrá fin a la legislatura para acudir a una nueva cita electoral.
Por el momento, Sánchez no cuenta con los apoyos necesarios para actualizar su mandato y, de hecho, actualmente ni siquiera cuenta con la nominación del rey Felipe VI para someterse a una sesión de investidura.
Pedro Sánchez presentará este martes un documento con 300 propuestas con las que intentará buscar el apoyo de otros partidos desde una base programática para formar un Gobierno monocolor integrado únicamente por miembros del PSOE.
«Las fuerzas políticas han de ser responsables y, por tanto, si en ese proyecto está contenido parte de su programa, todo invitaría a pensar que Unidas Podemos, viéndose reflejado en la propuesta, tuviera responsablemente que darle el parabién», dijo este viernes Celaá.
Pese a que por el momento no se vislumbra un acuerdo con Unidas Podemos para desbloquear la situación, varios dirigentes del PSOE insistieron en las últimas horas en que no contemplan ir a una repetición electoral, aunque los estudios demoscópicos pronostican que los socialdemócratas aumentarían su ventaja respecto al resto de partidos si se vuelve a votar.
Fuente Sputnik
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