“Creo que es importante destacar que en el programa de gobierno que la Nueva Mayoría comprometió con la ciudadanía, se dice expresamente que promoveremos políticas destinadas a reforzar la autonomía de las mujeres, mencionándose explícitamente el compromiso de la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo en caso de peligro de la vida de la madre, violación o inviabilidad del feto, que es lo que ahora estamos legislando”, puntualizó el congresista.
De Urresti explicó que en esta primera sesión asistieron las ministras Claudia Pascual, Javiera Blanco y Carmen Castillo, quienes dieron a conocer los alcances de las tres causales. «Este es un proyecto que aborda un problema social que afecta a las mujeres de nuestro país. Ya es tiempo de debatir, de enfrentar esta realidad y esperamos generar un debate amplio, sincero y con altura de miras «, dijo.
En tal contexto, el senador socialista remarcó que «la legislación debe hacerse pensando en el bien común y en la mayoría, y esto es especialmente urgente cuando los estudios nos señalan que mientras no legislemos, quienes son más vulneradas son las mujeres de menores recursos que igual terminan exponiéndose a un “mercado negro” del aborto, con todos los riesgos sanitarios, vitales y penales que hasta hoy eso conlleva».
Para agilizar su tramitación, la comisión realizará sesiones extraordinarias donde se abordarán aspectos constitucionales de proyecto, y expondrán académicos de derecho constitucional, civil y penal, organizaciones y expertos.
Según cifras del Ministerio Público, en Chile se realizan cerca de 17 mil abortos anuales y durante mucho tiempo fue, además, la primera causa de muerte materna en Chile, debido a las complicaciones que derivan en abortos sépticos. Hoy se estima que del total de muertes maternas que ocurren, al menos un 10% es por aborto.