Calificando como “desleales y tendenciosas” las críticas del senador DC, Jorge Pizarro y el diputado PPD, Jorge Tarud, en contra del canciller Heraldo Muñoz por su posición solidaria con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, el legislador Alejandro Navarro, enfatizó que “el nuevo enfoque de nuestra diplomacia es latinoamericanista e integrador. Coherente con esto, los parlamentarios antes mencionados deben entender que Chile no apoyará a los golpistas venezolanos”.
Lo anterior además, expresó el Presidente del MAS “es la posición mayoritaria en Unasur y en la OEA. En esta última instancia –aunque cueste creerlo- Estados Unidos quedó casi completamente aislado. Muestra de ello es que el viernes 7 de marzo su Consejo Permanente aprobó una declaración conjunta en la que “reconoce y respalda” el diálogo iniciado por el gobierno de Venezuela, solicitando su continuación”.
“Ello-continuó- es una expresión del cambio copernicano de los equilibrios políticos regionales, es el hecho que 29 estados respaldaron esta posición solidaria con Venezuela y sólo dos (Canadá y Panamá) apoyaron una propuesta intervencionista defendida por Estados Unidos.
Es en este contexto el canciller Muñoz declaró al diario brasileño O’Globo (4 de abril) que “Unasur tiene la responsabilidad de defender al gobierno (venezolano) que una minoría quiere derrocar”. Lo que Navarro calificó como “declaraciones correctas y consecuentes con la tradición republicana de rechazar los golpes de Estado”.
El legislador, indicó que “por cierto que estas expresiones dañan el esfuerzo desestabilizador en el que se han embarcado las derechas del continente. En el caso de Chile es la UDI quien levanta con más fuerza estas banderas intervencionistas. Pero parece que este partido pinochetista no se encuentra sólo en sus afanes”.
El senador Pizarro afirmó a El Mercurio que al canciller Muñoz “no le corresponde calificar” a los grupos que se oponen al Gobierno de Venezuela como tampoco al propio Gobierno de dicho país. “Por lo que al parecer, desconoce con sus declaraciones el hecho que -en consejo extraordinario realizado en Santiago el 12 de marzo- los cancilleres de los países sudamericanos acordaron pronunciarse sobre la situación de Venezuela. Muestro de ello es la creación de una comisión integrada por ellos mismos (que en estos momentos inicia su segunda visita a Caracas) la que tiene como fin contribuir con el Gobierno y el pueblo venezolano a facilitar un diálogo que apunte a la pacificación del país”, dijo el líder del MAS.
Por su parte, Tarud, expresó que para que se produzca un diálogo entre el gobierno y oposición de Venezuela, que sea auspiciado por los cancilleres de Unasur, es necesaria “la liberación de todos de uno de los líderes de la oposición, Leopoldo López” y exigió además, la restitución en su cargo a la diputada María Corina Machado la que –en su parecer- fue destituida en forma “absolutamente arbitraria”.
Navarro señaló que “es increíble constatar como un parlamentario de la Nueva Mayoría, que ocupa la Presidencia de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, ampare con argumentos tan falsos la intentona golpista de la derecha venezolana”.
“Leopoldo López-agregó- está siendo procesado por la justicia venezolana por encabezar una violenta revuelta que busca derrocar el régimen legalmente constituido, accionar que ha incluido el asesinato de cinco policías y decenas de civiles, entre ellos la chilena Giselle Rubilar, cuya suerte Tarud olvidó rápidamente”.
“En tanto, Corina Machado no fue destituida por el Gobierno sino por el Parlamento, amparados por la constitución venezolana. Esto, por usar el sillón de una potencia extranjera (Panamá) para atacar y buscar desestabilizar al Gobierno de su país. ¿Se imaginan lo que ocurriría si un parlamentario chileno aceptara ocupar el sillón de Perú para disparar contra nuestro gobierno democrático en la OEA o en la ONU? Sin duda que su actitud sería definida como de “traición a la patria” y correría la misma suerte que Machado”.
El presidente del MAS expresó que “por suerte que Tarud no es canciller. Si así fuera, ya estaríamos en guerra con Perú. Es increíble que un partido progresista como el PPD ampare las sandeces que semana a semana profiere este diputado, las que ahora incluyen en su menú el cuestionamiento al pertinente nuevo enfoque de la política exterior chilena”.
El Ciudadano
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