Dicen que siempre hay una segunda oportunidad. Eso es lo que buscará el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un posible segundo encuentro con su homólogo ruso, Vladimir Putin, después de la cumbre celebrada en Helsinki, Finlandia, el pasado 16 de julio.
Este jueves, la Casa Blanca informó que Trump pidió a su asesor de seguridad nacional, John Bolton, que extienda una invitación a Putin a Washington en otoño (de septiembre a diciembre).
«Esas conversaciones ya están marcha», precisó la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, en su cuenta de Twitter. Por esa vía, también acotó que en la cumbre pasada se acordó que «hubiera un diálogo constante entre el personal de ambos consejos de seguridad».
Sin embargo, fue el mismo Trump quien manifestó querer encontrarse de nuevo con el jefe del Kremlin. «Estoy deseando nuestro segundo encuentro de modo que podamos empezar a implementar algunas de las tantas cosas discutidas», escribió por Twitter.
Como parte de esos temas, mencionó la lucha contra el terrorismo, la seguridad en Israel, la proliferación nuclear, Ucrania, los ciberataques y Corea del Norte. «Hay muchas respuestas a estos problemas, algunas fáciles y otras difíciles, pero todos pueden ser solucionados«, agregó.
El encuentro en Helsinki centró la atención por las disputas que han mantenido ambos mandatarios en distintos temas. Desde el partido Demócrata le pidieron a Trump tener cuidado al tratar con Putin y muchos se pronunciaron en contra del encuentro, mientras los republicanos lo instaron a mostrar su «posición de fuerza».
Para ponerle más leña al fuego, justo tres días antes de la cumbre, un juez estadounidense decidió imputar a 12 funcionarios de inteligencia rusos por supuestamente «interferir» en la campaña de Hillary Clinton para las elecciones de 2016.
Trump no jugó bien sus piezas
El tablero del ajedrez estaba listo ese lunes 16 de julio y Trump, por la misma presión de sectores estadounidenses, no jugó bien sus piezas. Se le criticó el decir que ambos países son responsables de la actual tensión que hay en las relaciones bilaterales por «haber cometido algunos errores».
Sin embargo, lo más grave vino después, por sus declaraciones sobre la denominada «trama rusa», caso que la justicia estadounidense usa para intentar culpar al Gobierno de Putin de interferir en las elecciones con el objetivo de favorecer a Trump.
Sobre ese tema, el Mandatario estadounidense manifestó que sus funcionarios de inteligencia le han dicho que «creen que es Rusia», pero la sorpresa vino al acotar que él no ve «ninguna razón por la que debería ser Rusia».
Eso encendió la polémica en los mismos funcionarios de su administración y después se vio obligado a recular diciendo que tiene «gran confianza» en su gente de inteligencia. En ese primer round, por lo visto, Trump no salió bien librado y ahora buscará un segundo encuentro, quizás para mostrar «su firmeza».
https://www.elciudadano.cl/mundo/luego-cumbre-putin-trump-congreso-de-ee-uu-dispuesto-a-considerar-nuevas-sanciones-a-rusia/07/17/
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