Que se anule la Ley de Pesca hasta que se investigue si hubo o no soborno en su tramitación, exigió el vicepresidente de la Izquierda Ciudadana, Diego Ancalao. A su juicio, este sería un verdadero gesto de perdón de los partidos políticos, por la corrupción que hoy envuelve a esa “casta” del país.
El dirigente adhiere así y respalda la demanda que nace de los propios pescadores afectados, quienes llegaron hasta el Congreso para denunciar un posible pago millonario a la comisión de pesca, por parte de Corpesca.
“Anular la Ley de Pesca sería una señal clara de que los políticos están escuchando el malestar popular que cada día se acrecienta más, al salir a la luz pública innumerables situaciones de corrupción y de financiamientos indebidos de campaña, lo que finalmente hace tener casi la certeza de que los legisladores, lejos de defender los intereses de la ciudadanía, están defendiendo intereses personales o de las grandes empresas que les han entregado recursos”, sentenció.
Agregó que si la clase política no da señales concretas para cambiar pronto el rumbo, habrá soluciones tristes, tal como ha ocurrido en el pasado en momentos de crisis política.
“Uno de esos gestos políticos concretos es detener la aplicación de Ley de Pesca, que empobrece a miles de pescadores y de comunidades mapuches y huiliches, mientras se mantiene la investigación respecto de un posible cohecho”, enfatizó.
Cabe recordar que esta denuncia se funda en una hecha por el ex senador, Nelson Ávila, quien fue más concreto y habló de 500 millones de pesos que habrían sido asumidos como gastos reservados por los parlamentarios integrantes de la Comisión de Pesca se merece algo mejor”