El Estado Islámico (EI) ha decapitado a un combatiente de las fuerzas kurdas o «peshmergas», según un vídeo en el que el grupo yihadista amenaza al gobierno de la región autónoma del Kurdistán iraquí y a Estados Unidos por su lucha contra los extremistas en el norte de Irak.
En un vídeo titulado ‘Mensaje con sangre’, que difundió este grupo en las últimas horas, se ve a un combatiente kurdo arrodillado en el suelo cerca una mezquita en la ciudad de Mosul y rodeado por tres yihadistas del EI.
Uno de estos yihadistas amenaza de muerte al presidente de EE. UU., Barack Obama, y a su pueblo por su «intervención flagrante» en Irak.
«Este es el destino de uno de tus milicianos, a quien has empujado a una guerra contra los musulmanes y es el mismo destino que encontrará el resto de los capturados si no pones fin a tu alianza con los judíos y cruzados».
CRÍTICAS
Al igual que obligaron a hacer a James Foley, uno de los prisioneros -identificado por ‘Daily Mail’ como Hassan Mohammed Hashin, lee cuidadosamente en kurdo un mensaje preparado por el ISIS. En la declaración, critica duramente a los líderes kurdos:
«Ustedes cometieron un gran error por darle la mano a los estadounidenses».
Poco después, un trío de verdugos aparece de espaldas a la Gran Mezquita de Mosul -donde realizó su aparición pública Al-Baghdadi- sometiendo a uno de los prisioneros, arrodillado frente a cámara.
El líder del trío expresa entonces un discurso en árabe, cargado de odio contra los Estados Unidos:
«EL PERRO DE ROMA»
«Tengo dos mensajes: el primero es para el perro de Roma, el patán Obama. ¿Cómo has enviado a tus soldados otra vez a Irak? ¿Olvidaste los miles de muertos norteamericanos a los que sacrificaste en las guerras? ¿Olvidaste las imágenes de los cadáveres, deformes y toda esa gente que aun está sufriendo? ¿La economía de los Estados Unidos se ha recuperado de su crisis para entrar en una nueva?»,
pregunta.
Luego redirige su diatriba:
«El segundo mensaje es para el sirviente del judío Mas’od. Éste es el destino de uno de tus militantes y de otros a los que enviaste a los musulmanes a menos que termines tu trabajo con los judíos y tu alianza con los cruzados»,
le dice a los líderes kurdos.
Entonces extrae un largo cuchillo de su cinturón, toma al prisionero kurdo de su pelo y comienza a cortarle la cabeza.