Italia: ¿Por qué es decisivo el referéndum constitucional de este domingo?

Tras el triunfo del Brexit en Gran Bretaña y la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, otra inesperado escenario podría sorprender al mundo Occidental este próximo domingo. En esta ocasión la contienda se libra en Italia, donde los ciudadanos están llamados a las urnas para votar en el referéndum que decidirá sobre la reforma constitucional impulsada por el primer ministro Matteo Renzi.

El mandatario pretende acabar con el llamado “bicameralismo perfecto” ya que si se aprobara su propuesta, el Senado se convertirá en una cámara de mera representación territorial pero sin capacidad de legislar. Además de eso, el número de senadores pasaría de 315 a 100 y se eliminaría el sueldo que cobran.

Con esta iniciativa, el gobierno de Renzi pretende dar más poder al Estado, en detrimento de las regiones, y facilitar la aprobación de leyes propuestas por el Gobierno.

Questo è il quesito elettorale. Non si vota su altro. Con il Si, si cambia. Con il No, tutto rimane bloccato ancora. pic.twitter.com/DLLYEkFJe1

— Matteo Renzi (@matteorenzi) 1 de diciembre de 2016

Italia se encuentra en una situación económica dramática, ahogada por una deuda que se sitúa en el 135% del PIB, un paro que afecta a casi el 38% de los jóvenes. A eso, se suma que a nueve años del inicio de la crisis financiera de 2007, la producción sigue un 8% por debajo de su nivel previo a la crisis, y entre los principales perjudicados de esta situación están los bancos, que arrastran un total de deudas incobrables de 360.000 millones de euros. Así lo dibujaba este viernes un análisis en el diario The Guardian.

Tampoco se puede obviar el impacto de la crisis de refugiados, sobretodo en las islas italianas, como Lamepdusa, que hace unos meses se vio totalmente desbordada por la llegada masiva de migrantes y la poca capacidad de dar respuesta ante la soledad a la que fue abandonado el país por parte de sus pares europeos.

Desde las posturas del establishment europeo se argumenta que un voto en contra de Renzi pondría en peligro la participación de Italia en la Eurozona y consideran que el primer ministro es una figura fundamental para resolver los problemas de los bancos italianos, los más débiles de la Eurozona.

Italexit, ¿la siguiente sorpresa para la UE?

Con la consulta sobre la Constitución, Renzi plantea a la vez un plebiscito sobre su persona y sus políticas. El primer ministro anunció en varias ocasiones que si pierde la elección, renunciará a su cargo. Sin embargo, el pasado miércoles ya dijo que “el referendo no es sobre mí”, al plantear la posibilidad de renunciar si el ‘No’ triunfa.

Según los sondeos, que calculan en un 25% el número de indecisos, el primer ministro perdería la consulta por una diferencia de entre 5 y 10 puntos.

Al frente de la opción del no se hallan el Movimiento 5 Estrellas (M5E), que lidera el humorista Beppe Grillo y la xenófoba Liga del Norte, ambos exponentes de las fuerzas italianas más populistas y antieuropeístas. También el partido de Silvio Berlusconi Força Italia (FI), se sitúa entre los detractores. Pero en contra del sí hay además diversos políticos del partido del propio Renzi, el Partido Demócrata (PD), contrarios a una reforma que califican básicamente de centralista e ineficaz. Por su parte, la izquierda italiana afirma que la reforma busca la pérdida de derechos y el empeoramiento de la democracia.

El referéndum italiano es visto como la mayor amenaza desde Europa porque un voto en contra del gobierno podría desatar una cadena de eventos que podrían llevar a Italia –miembro de la Unión Europea (UE) desde sus comienzos- a abandonar el euro. La alianza europea teme que una eventual derrota del primer ministro impida concretar los cambios para rescatar al país del desastre económico. De hecho, si Renzi dimite, es probable que se convoque a elecciones anticipadas con altas probabilidades de dar una victoria a los antieuropeístas.

De hecho, el Movimiento Cinco Estrellas, que hoy tiene 29% de intenciones de voto, acercándose al Partido Democrático de Renzi (33%), ya ha advertido que en caso de ganar las elecciones, convocaría a un referéndum sobre la permanencia en la UE.

Eso en un país que ha tenido 65 gobiernos en 71 años y que en la actualidad presenta una gran fragmentación política.

En una entrevista la periodista del diario italiano de izquierda Il Manifesto y actual directora de la edición italiana de Le Monde Diplomatique, Geraldina Colotti, difundida a través de Más Voces, un proyecto que surge desde la Unión de Radios Libres y Comunitarias de Madrid (URCM), la analista asegura que «el referéndum constitucional que quiere hacer este gobierno es un pacto que no va a salir de un nuevo pacto social, como una constituyente. Al contrario, son decisiones desde arriba que van a cambiar lo bueno que había en esta Constitución porque el Senado no será elegido por el pueblo, sino por los diputados regionales mismos», explica.

Sobre las proyecciones ante la posible crisis política que puede abrirse con el referéndum y la actual situación económica del país, señala que «después de los años 70, con el fin de los grandes partidos y la caída de la URSS, hay una fragmentación e interiorización de la derrota por parte de la izquierda. No hay un partido comunista ni fuerzas representativas capaces de organizar una nueva subjetividad revolucionaria. La izquierda se pelea por casi nada, por un asiento en el parlamento, por ejemplo».

Y agrega: «No hay una nueva dialéctica entre el conflicto y el consenso para construir un nuevo bloque social anticapitalista, como lo que pasó en América Latina a principios del siglo XXI, por ejemplo, en Venezuela, Ecuador o Bolivia, que aglutine todas las fuerzas fragmentadas alrededor de unos temas fuertes para llegar al gobierno«.

El escenario es incierto para Italia. Dejando a un lado las encuestas, que en los últimos tiempos no aciertan una, este domingo un nuevo capítulo se abre en la historia de Italia. Una página más que podría escribirse también en el progresivo derrumbe del proyecto de la UE, sus socios, economías y modelo.

  Meritxell Freixas @MeritxellFr