Se define como macarra a una persona pendenciera, que busca pleitos. Esto es precisamente lo que hace el presidente de Francia, Emmanuel Macron, al obstaculizar la paz entre Rusia y Ucrania, promoviendo espacios de conversación paralelos cuando ya se ha trazado un camino hacia la paz en el que se espera la participación de Ucrania.
Por Bruno Sommer
Gran parte de los rotativos españoles y de Europa han dedicado sus portadas estos días para amplificar a un Macron que está actuando más bien, como un “macarra” que intenta movilizar a la Unión Europea torpedeando el acuerdo para la paz entre Rusia y Ucrania promovido por Trump.
“Macron tira de la UE en busca de una salida tras el “shock de Múnich”, tituló El Mundo, “Reunión de urgencia para no dejar caer a Ucrania”, puso en portada el derechista ABC.
Macron, un “empleado de la familia Rothschild” ha tratado de azuzar los ánimos en Europa contra Rusia una y otra vez pintandolos como si casi se hablara del “demonio”.
De proponer el envío de soldados europeos al frente para luchar a favor de Ucrania, de lo que se retractó hace unos meses, ahora busca constituir conversaciones paralelas, cuya razón de fondo no es otra que alinear a los mandatarios europeos en la defensa de los intereses de los capitales de la oligarquía local que se han invertido en Ucrania y desean cobrarse, o al menos intentar recuperar lo apostado en esa tierra eslava que al parecer pagará con “tierras raras”, hoy en abierta disputa.
Mientras que la primera reunión, a la que Macron convocó a solo 7 presidentes de la UE, fracasó al no invitar a los países más involucrados, como los de Europa del Este, las conversaciones en Arabia Saudita entre Rusia y Estados Unidos, sin la participación de Ucrania, concluyeron.
No es que Ucrania no fuese invitada, ésta simplemente decidió no asistir.
El secretario de Estado nortamericano Marco Rubio, ha señalado respecto al camino para la paz , «todos los involucrados deben estar de acuerdo con ello; debe ser aceptable para ellos», en referencia a las partes hoy enfrentadas en guerra.
Por su parte, el Kremlin ha abierto la puerta a la posibilidad de una reunión entre Zelenski y Putin.
Pero Macron no se da por vencido, no quiere que Ucrania alcance la Paz con Rusia más allá de sus declaraciones de buena intención. Lo que busca es generar rusofobia en Europa y convocó a un nuevo encuentro, el jueves 20 de febrero, ésta vez, sí invitando a los países “marginados” de la primera reunión y respondiendo preguntas de internautas más tarde en videoconferencia.
Macron ahora quiere instar a los países de la Unión Europea a enviar soldados “una vez alcanzada la paz” intenta aclarar.
“En términos de exportaciones de armas, Francia se ha consolidado como el segundo mayor exportador global, solo por detrás de Estados Unidos”
“Si somos débiles con Rusia, sacrificaremos a nuestra próxima generación y su seguridad”, ha señalado el presidente de Francia.
El canciller alemán Olaf Scholz, ha sido claro en su rechazo a la idea de Macron considerándola «prematura» e «inapropiada», pero Macron y Keir Starmer insisten en la creación de una «fuerza de garantía» integrada por 30.000 efectivos para proteger ciudades, y puertos de Ucrania.
En lugar de propiciar que Zelenski se sume a las conversaciones ya iniciadas en Arabia Saudita, Macron actúa como Boris Johnson, quien recordemos viajó camuflado en un tren desde Polonia hasta Kiev para disuadir en ese entonces a Zelenski de negociar la paz con Rusia y respaldarlo para que siguiera adelante con la guerra.
Macron, “el macarra”, deja en claro su falta de sentido de urgencia en el diálogo para la paz ya iniciado en Arabia Saudita, al que eventualmente Zelenski se sumaría el 10 de marzo, según se ha señalado. ‘¿Cuál es nuestro objetivo? Es muy simple: en primer lugar, vamos a hacer todo lo posible para devolver la discusión a un buen camino’ apuntó Macron. Un camino que puede tardar años, mientras los muertos siguen siendo de Rusia y Ucrania.
“Si somos débiles con Rusia, sacrificaremos a nuestra próxima generación y su seguridad”
Emmanuel Macron.
El copríncipe de Andorra, Emmanuel Macron, ha dicho que el lunes 24 de febrero, viajará a Washington para intentar seducir a Trump. Se espera que su oferta vaya en la línea de sus palabras “los europeos debemos incrementar nuestro esfuerzo bélico” y así convencerle.
Durante su videoconferencia señaló, «Les voy a decir: ‘No puedes ser débil ante el presidente Putin. (…) ¿Cómo puedes ser creíble frente a China si eres débil frente a Putin?” , expresó el “pequeño Napoleón”.
No se puede soslayar, que Francia es uno de los principales actores en la industria armamentística mundial. En términos de exportaciones de armas, se ha consolidado como el segundo mayor exportador global, solo por detrás de Estados Unidos. Entre 2019 y 2023, Francia aumentó su cuota de mercado del 34% al 42%, superando a Rusia.
Intereses en la guerra no me digas que no hay “Sr. Macarra” .
Sería mejor que Macron reconociera que soldados franceses hace bastante tiempo como parte de la OTAN, estaban dando entrenamiento a las fuerzas de Ucrania, al igual que militares ingleses, estadounidenses y que la “banda” de Biden a la que él se sumó tenía ya muchos intereses comprometidos en Ucrania.
Que se paseaban por el centro de Kiev con sus trajes e insignias y que las ONGs cooperadas no eran pocas asistiendo a medios de comunicación para expandir la rusofobia y alentar a la población para cuando fuera el momento de alistarse a matar a otro por defensa de una bandera y un territorio.
Que reconociera el rol que ha tenido Europa y el mismo Estados Unidos en el estallido de la guerra y hagan una “meaculpa”, del error de haber condenado a Rusia desde Crimea en adelante al no reconocer una decisión soberana del pueblo local resuelta con democracia y el voto popular de los habitantes de la península.
Que regresen por Gibraltar todas las embarcaciones de carácter militar, que entraron por los Dardanelos al mar de Mármara y de éste por el estrecho del Bósforo al mar Negro pretendiendo llegar hasta el mar de Azov.
¡Que naveguen por esas aguas el comercio, el turismo, la paz!
Vamos Macron que Rusia no planea invadir Europa ni de manera armada ni de ninguna otra forma. Que antes quiso integrarse y no le dejaron. Que lo que buscan hace años es no más bloqueos, es comercio, intercambio cultural de los pueblos y el mundo multipolar.
Que le han asediado por tierra en Ucrania, buscan hacerlo en Georgia y también por mar.
Lo que quiere el Kremlin es que el gas que necesita Europa transite libremente, que las líneas férreas desde el Pacífico Oriente de China puedan ser transitadas con normalidad hasta Madrid y de Madrid a Lisboa en una Franja de la Ruta armoniosa.
¿Es eso lo que le duele tanto a los jefes que defiende Emmanuel Macron?
Hay que ser ecuánime, tanto Ucrania como Rusia son responsables de lo ocurrido. Aquí no hay inocentes, ni menos tampoco lo es Inglaterra, Europa y Estados Unidos quienes han sido “arte y parte”. Tampoco hay culpables únicos ni exclusivos. Vamos madurando.
La reparación para Ucrania debe ser ya y cooperada mundialmente. Si Europa quiere participar de una mesa que sea para que exprese con cuánto se va poner para reparar todo lo ocurrido o bien se olvide de cobrar lo que destinó a incendiar aún más la zona.
Entender que no son solo miles de civiles los heridos, desplazados, muertos, sino también cientos de miles de soldados, humanos que hoy sus familiares lloran, extrañan y nadie quiere que sigan muriendo más ni de un lado ni del otro del frente de batalla. ¡Eso es lo que importa y no el pago con un puñado de tierra tras tanto desastre!
Para despedirme, Presidente Macron, quiero sepa que me gustaría equivocarme en el apelativo que le he dado, pero está por comprobarse si realmente le queda como un ‘sombrero’. Sin embargo, digo que, si desea figurar de manera positiva al final de esta catástrofe provocada entre hermanos y concebida en ‘laboratorios de guerra’ durante tantos años, debe actuar ya sin más dilación por el fin del conflicto.
Llame en su visita a Washington junto con Trump a Zelensky y pídanle reafirme su compromiso de asistencia a los diálogos de paz ya iniciados en Arabia Saudita, que prepare sus propuestas para una paz duradera y racionalice la posición militar, material y económica en la que se encuentra, terminando de este modo con la agonía del pueblo ucraniano que ya tanto ha perdido y sufrido a casi 3 años de “iniciada” la guerra un 24 de febrero de 2022.
Artículo publicado originalmente en Diario Red