Minipartidos, actores de reparto en la partidocracia mexicana

Nuevos partidos políticos aparecen en el horizonte de las elecciones mexicanas del 2021. ¿Implica esto un incremento en la diversidad democrática o, por el contrario, es un síntoma del abaratamiento de los accesos al poder político?

Los «minipartidos» son un fenómeno de la partidocracia mexicana actual y han llegado para quedarse. Sería lícito preguntar al autor del presente artículo -quien no es historiador ni catedrático de Ciencia Política- qué entiende por «minipartido».

Propongo, pues, una consideración arbitraria y superficial, adecuada a los modestos alcances de un trabajo como el presente. Son partidos de reciente arribo al escenario político, que dependen de coaliciones para garantizar su supervivencia, debido a la escasa cantidad de votos que atraen por sus propios méritos. Rara vez parten en sus inicios de una conceptuación clara del proyecto de nación que persiguen, ni cuentan con ideólogos trascendentes en la formación de la conciencia política mexicana, como sí tuvieron en algún momento el Partido Revolucionario Institucional, el Partido Acción Nacional, el Partido Comunista o el Partido de la Revolución Democrática y recientemente, el Movimiento de Regeneración Nacional.

En vez de detenernos en un recuento exhaustivo de minipartidos, nos enfocaremos mejor en tres que en este momento resultan relevantes para el proceso electoral en marcha, a resolverse el próximo 6 de junio: Redes Sociales Progresistas (RSP) y Partido Encuentro Solidario (PES).

Caso 1: Redes Sociales Progresistas (RSP)

Registro ante INE como Partido Político: 2020

Ideología: Progresismo, reformismo.

Posición: Centroizquierda

Eslogan: Por un México Hacia Adelante

Presidente: José Fernando González Sánchez

Su primer representante legal fue Iván Peña Neder, quien llegó a fungir como funcionario de Gobernación, entre cuyos antecedentes destacan una denuncia por violación tumultuaria en agravio de su cónyuge y la creación de «México Despierta», organización clandestina fascista. Tras una confrontación con Elba Esther Gordillo, principal arquitecta de RSP,  Peña Neder resultó despeñado desde la presidencia del partido por José Fernando González Sánchez, exmaestro sinaloense cuyo currículum alcanza su cumbre al convertirse en yerno de Elba Esther Gordillo. Entre los buenos oficios que se le achacan para hacer méritos para su suegra se encuentra el contrabandear relojes Rolex de San Diego a Tijuana para obsequiarlos a los líderes sindicales.

La batalla por el poder entre González Sánchez y Peña Neder fue larga y aparatosa, y alcanzó uno de sus capítulos más rocambolescos cuando González Sánchez intentó establecer una alianza entre RSP y el Partido Digital, un nanopartido semiembrionario empollado por Ricardo Fernández Audiffred, un oscuro empresario mexicano maestro en Seguridad Nacional y alquimista tecnológico de la política. La alianza se celebró en un antro de Polanco, hasta donde llegaron partidarios del recién defenestrado Peña Neder a reventar la ceremonia, de cuya sede Fernández Audiffred y González Sánchez tuvieron que huir por la cocina.

Redes Sociales Progresistas es el segundo apéndice que la Maestra Elba Esther Gordillo ha logrado adherir al galeón de la partidocracia mexicana; en primero de ellos es el Partido Nueva Alianza (Panal), el cual conserva su registro como partido estatal en Puebla, pese a perderlo a nivel nacional.

En Puebla, RSP es dirigido por Ramón Fernández Solana. El partido ha enfrentado en Puebla procesos por afiliación indebida.

Entre los estatutos de RSP se encuentran «prevenir, atender y erradicar la violencia política contra las mujeres en razón de género», «Garantizar la igualdad sustantiva de mujeres y hombres en su vida interna» y «fomentar la vida cívica y democrática en todo el territorio nacional».

Cabe señalar que su registro ante el Instituto Nacional Electoral fue duramente cuestionado porque se les acusó de recibir recursos de miembros del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) del cual Gordillo fue dirigente durante varios años y sobre el cual aún tiene una fuerte influencia, la cual podría ser clave para inclinar el rumbo de una elección, como sucedió en 2006, cuando la «Maestra» decidió dar la espalda al PRI y apoyar la candidatura de Felipe Calderón, a la postre presidente de México.

Caso 2: Fuerza por México (FxM)

Registro ante INE: 2019

Fundador y presidente: Gerardo Islas Maldonado

Eslogan: «Unidos hacemos la fuerza»

Ideología: Progresismo, lopezobradorismo

Posición: Centro izquierda

El poblano Gerardo Islas Maldonado, mente detrás de FXM, es un político joven y con ambiciones. A los 15 años ya era subdirector del Diario Círculo Poblano, a los 19 ya era director y a los 26 años transformó aquel periódico en Grupo Sexenio Comunicaciones, cuyo consejo de administraciones preside. Ligado al morenovallismo en la Alianza Compromiso por Puebla, también se desempeñó en el partido gordillista Nueva Alianza. En 2017 fungió como secretario de Desarrollo Social a las órdenes del panista Antonio Gali.

Gerardo Islas llegó a la intuición de que la alianzas entre partidos antes opositores reflejaban una falta de ideología y que estaban motivados solamente por el deseo de llegar al poder.

Por ello, concibió un partido político cuyos objetivos, tal como se registran en sus estatutos, no alcanzan el nivel más elemental de definición política. En dichos estatutos se mencionan «los valores cívicos, la cultura democrática, la igualdad sustantiva y la participación paritaria en la integración de sus órganos». También se autodefine como «incluyente y de vanguardia, involucrado con todos los estratos sociales y culturales del país; tiene un enfoque moderno, de igualdad, paridad y equidad, acorde con los tiempos y su constante evolución».

Entre sus perfiles destacan Manuel Jiménez Guzmán, presidente de FXM en CDMX, Jesuá Llamas, candidato por la alcaldía de Querétaro, Viviana Barbosa Bonola, candidata por la gubernatura de Tlaxcala. El candidato de FxM a la alcaldía poblana será Rafael Moreno Valle Buitrón, líder del partido en el estado de Puebla.

Cabe señalar que su líder nacional, el mencionado Gerardo Islas, fue señalado por el gobernador Miguel Barbosa como presunto responsable por un desvío millonario de recursos mientras estuvo al frente de la Secretaría de Desarrollo Social estatal (hoy Secretaría del Bienestar) durante la administración de Antonio Gali.

Según las acusaciones, el dinero del programa Hagamos Hogar, destinado a la reconstrucción de viviendas destruidas por el sismo del 19 de septiembre de 2017, fue a parar a las campañas políticas. Esa investigación sigue en pie.

Caso 3: Partido Encuentro Social (PES)

Presidente: Hugo Eric Flores Cervantes

Eslógan: El podio es tuyo

Ideología: Conservadurismo social, transversalidad

Posición: Centroderecha, derecha

Registro ante INE: 2006; disolución por registro insuficiente: 2019

Resurgimiento como Partido Encuentro Solidario: 2020

Presidente: Hugo Eric Flores Cervantes

Eslogan: La casa de todos

Ideología: Conservadurismo, socialconservadurismo, derecha cristiana, transversalidad

Se trata de un partido fundado en Baja California en 2006, que desde los primeros años de su creación se alió con otros partidos conservadores como Acción Nacional y Nueva Alianza. En 2013 contendió por primera vez al lado de partidos fuera del espectro de la derecha, tales como el PRI y el PVEM y el PT, elecciones estatales de Baja California, donde se vieron derrotados por la coalición encabezada por el PAN.

Partido Encuentro Social es reconocido como un partido «cristiano» (las comillas señalan aquí la acepción de doctrina religiosa inspirada en las enseñanzas de Cristo, pero desde un paradigma no mariano, guadalupano, católico, apostólico ni romano) , al grado que en algún momento llegó a incluir un Ichtus en su logotipo.

Entre sus propuestas destaca la recolección del IVA por los propios estados, con el objetivo de agilizar la recolección de impuestos y proveer un mecanismo expedito de recaudación por parte de las entidades federativas.

A pesar de que su líder Hugo Eric Flores Cervantes ha negado muchas veces que su partido se guíe por máximas religiosas, algunos de sus representantes se han manifestado en contra de la homosexualidad, el aborto o las madres solteras.

Este perfil conservador fue uno de los motivos por los que causó extrañeza el registro de Gerardo Fernández Noroña en 2018, quien además de declararse ateo había seguido hasta ese momento una línea progresista y de izquierda en su labor política, definiendo su identidad política como “de Morena”, a quien agradeció por lo llamarle la atención por arrimarse al PES, ya que desde que se había muerto su abuela, no lo regañaba nadie, según sus propias palabras.

En 2020, el partido resucitó con un nombre apenas diferente: Partido Encuentro Solidario, nuevamente bajo la dirección de Hugo Eric Flores Cervantes. En agosto de ese año, el INE ratificó su registro con seis votos a favor y cinco en contra, incluyendo el del consejero presidente Lorenzo Córdova.

Encuentro Solidario retomó las posturas conservadoras de Encuentro Social, como la oposición a la legalización aborto y “por la vida y la familia”, aduciendo reiteradamente “una doctrina humanista”. El INE detectó la participación de al menos 15 ministros de culto religioso en al menos cinco asambleas de afiliación de ciudadanos al partido.

Entre los objetivos y obligaciones desglosados en los estatutos del partido destaca «Lograr, mediante los cargos de representación popular y de gobierno que se obtengan a través del voto ciudadano, el establecimiento del imperio de la ley, mediante un modelo de justicia que mejore las condiciones sociales, económicas y políticas de todos los mexicanos».

El en octubre de 2020, la Jornada de Oriente reportó que el ex morenovallista y exgalista Fernando Manzanilla se había quedado con el control de Encuentro Solidario en Puebla, empleando a Francisco Ramos Montaño como presidente estatal del partido y a José Momox Sánchez en el órgano de planeación electoral del CEN. Tal como señaló dicho artículo, Manzanilla fue expulsado del gabinete del gobernador Barbosa Huerta, como resultado de una confrontación en torno al uso discrecional de casi un cuarto de billón de pesos.

El PES fue aliado de Morena y el PT en las pasadas elecciones, pero debido a los cambios en la ley que cuentan a los partidos los votos que reciba e impiden un reparto a posteriori como coalición. Encuentro Social perdió su registro pero obtuvo asientos tanto en la Cámara de Diputados como en los congresos locales.

El problema en Puebla es que poco a poco fue perdiendo a sus miembros que brincaron a otras bancadas. La última fue Mónica Lara Chávez, quien emigró al PT para buscar la reelección. Antes abandonaron el barco Vianey García, Miguel Trujillo y la actual presidenta del Congreso, Nora Merino.

Minipartidos: ¿Contribución o resta a la democracia?

Estos son tres de los partidos que tendrán una participación en las elecciones de junio de 2021. La relevancia o irrelevancia de dichas participaciones aún está por definirse. Por supuesto que la llegada de nuevas propuestas al escenario político mexicano puede abrir nuevas oportunidades para que la democracia por fin se manifieste. La percepción ciudadana, sin embargo, es que estos nuevos partidos, formados, como decíamos al principio, por viejos lobos de mar de la partidocracia mexicana, en realidad son artificios cuyo papel en las elecciones es «distraer el voto» , además de no ser mucho más que «changarros» cuya verdadera función es drenar las arcas públicas y encarecer la democracia, de por sí tan onerosa como poco representativa ante los ojos del ciudadano mexicano.