Atrás quedaron los días en que el gobernador en turno prodigaba permisos notariales a discreción y que los notarios públicos gozaban de holgura para maniobrar todo tipo de operaciones; así lo advirtió el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
El mandatario no descartó la posibilidad de que durante su administración no se otorgue un solo permiso notarial. Además, puntualizó que en caso de que llegara a otorgarse algún permiso, este sería bajo el esquema de oposición.
A esta declaración llegó tras señalar la participación de notarios y corredores públicos en la conformación de empresas mercantiles para perpetrar actos defraudatorios del erario público de la Federación, estado y municipios.
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Asimismo, señaló que en Puebla se ha vuelto muy frecuente que los notarios incluso lleguen al grado de suplantar a personas en actos jurídicos, sobre todo de compraventa de propiedad, en los que el propietario es sustituido por otra persona durante la comparecencia.
En curso, investigación de prácticas notariales y redacción de reglamento
Por lo mismo, el mandatario advirtió que su administración ya se encuentra fiscalizando los protocolos con que operan los notarios, como parte de una campaña general para vigilar adecuadamente la profesión notarial, que calificó como “de gran investidura y prestigio”.
Por lo tanto, el gobernador anunció la inminente publicación de “un reglamento de la Ley que tendrá la posibilidad de poner en marcha las funciones que están en la Ley, y que abonen a la investigación de mucho comportamiento irregular que se dio en el pasado”.
Con estas medidas, la carta blanca con la que los notarios públicos se han balanceado impunemente en el filo de la Ley se dirige a su extinción, en el marco de un ajuste de la Ley que forzará el apego a derecho de cada una de sus diligencias profesionales.