En una medida inesperada, el Senado decidió ayer postergar nuevamente la votación del proyecto de la Ley de Identidad de Género para que regrese por tercera vez a la Comisión de Derechos Humanos.
La iniciativa vivirá su décimo tercer periodo de indicaciones, algo que las organizaciones de la diversidad sexual han apuntado como un claro intento por obstaculizar la promulgación de la ley, que ya acumula tres años de tramitación.
Ayer, la iniciativa debió ser votada y despachada por los senadores para comenzar su segundo trámite en la Cámara de Diputados. Sin embargo, los y las parlamentarias decidieron que éste se vuelva a discutir en diciembre próximo, mientras que el proyecto queda sujeto a modificaciones hasta el 21 de noviembre.
La excesiva postergación de la ley -urgente en un país donde la mayoría de la población trans vive en la exclusión- ha molestado transversalmente a las organizaciones que trabajan por los derechos de la diversidad sexual. Desde el Movilh, Fundación Iguales y OTD Chile realizaron duras críticas al desempeño de los y las legisladoras.
«Es inaceptable e injustificable que este proyecto vuelva una vez más a la Comisión de DDHH, para que se discutan nuevamente los mismos temas una y otra vez. Esto demuestra que no hay una real voluntad política para que este proyecto se convierta en ley», señaló la directora jurídica de Iguales, Jimena Lizama.
En tanto, el presidente ejecutivo de Iguales, Luis Larraín, aseguró que el proyecto ha sido «una vergüenza» y recordó que la iniciativa fue comprometida en campaña por la presidenta Bachelet, aunque ha sufrido una dilación permanente.
«Los senadores han revisado una y otra vez los mismos temas y ahora quieren verlo todo de nuevo por cuarta vez. La senadora Van Rysselberghe va a volver a presentar las indicaciones que se han rechazado tres veces. Y esto es posible porque el Ejecutivo bajó la urgencia de discusión inmediata a urgencia simple. Entonces hay dos alternativas: o la peor coordinación política de la historia entre Ejecutivo y Legislativo, o un esfuerzo concertado entre ambos para chutear el proyecto», cuestionó.
MOVILH ANUNCIÓ MANIFESTACIÓN POR «BOICOT POLÍTICO» CONTRA LIG
Desde el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) señalaron que la ley no sólo ha sido atrasada, sino que además se busca eliminar las indicaciones que mejoraron el proyecto y que son parte del acuerdo que el Estado chileno selló con la organización a través de una mediación con la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El Movilh anunció que convocarán a una movilización masiva en contra del «injustificado boicot a la tramitación de la Ley de Identidad de Género», programado para el 19 de noviembre en la Quinta Normal. La activista del área trans de la organización precisó que “llamamos a transexuales, a lesbianas, a gays, a bisexuales y a heterosexuales a concentrarse el 19 de noviembre en forma pacífica en la Quinta Normal para decir no más a los acuerdos políticos que aplazan el respeto a nuestros derechos humanos”.
Para los activistas de la diversidad sexual es claro que la iniciativa ha sido boicoteada por las autoridades políticas y que no se trata sólo de un retraso. Por lo mismo, lamentaron el rechazo de los senadores Iván Moreira, Andrés Allamand y Jacqueline Van Rysselberghe a la normativa, agregando que consideran necesario que la presidenta de la Democracia Cristiana, Carolina Goic, explique públicamente si es efectivo que ella fue una de las principales gestoras del nuevo retraso de la ley.
Dinamarca recordó que “el derecho de las personas trans a cambiar su nombre y sexo legal con un trámite simple y ágil en el Registro Civil es un compromiso que el Estado asumió con el Movilh ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Por tanto, el Estado lejos de ceder a las presiones de algunos parlamentarios para limitar este derecho, debe simplemente cumplir lo comprometido a nivel nacional e internacional. Caso contrario faltará a la palabra empeñada ante la CIDH, lo que sentaría un nefasto precedente en el sistema interamericano”
La activista recordó que los y las niñas trans son quienes más requieren protección, por lo que no aceptarán que queden fuera de la norma y se obstaculice su derecho a ser identificados legalmente como son y se sienten.
LA POLÉMICA Y DESINFORMACIÓN SOBRE SITUACIÓN DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES TRANS
Uno de los puntos más polémicos fue la decisión del Ejecutivo de bajar la urgencia del proyecto a simple, lo que provocó que saliera de la tabla de discusión del Senado.
A través de La Segunda, el senador Andrés Allamand rechazó la idea de que niños, niñas y adolescentes puedan someterse al procedimiento de adecuación de documentos de identidad según su género en el Registro Civil, asegurando que los menores de 17 años no pueden tomar tal decisión sin permiso de sus padres.
Sin embargo, el proyecto establece que los/as niños/as de 14 realizarán el procedimiento siempre ante un juez del Tribunal de Familia, y con la anuencia de sus padres, misma regla que aplica para los/as adolescentes de 14 a 18 que no cuenten con el acuerdo de sus padres. Solamente aquellos/as adolescentes de 14 a 18 que tengan el acuerdo expreso de sus padres podrán realizar el procedimiento en el Registro Civil.
Luis Larraín recordó que el senador Allamand está equivocado, ya que en todos los casos de niños, niñas y adolescentes menores a 18 años, los padres deben intervenir.
«Aunque estimamos que la gran mayoría de las personas trans que se sometan al procedimiento serán mayores de edad, es necesario también evitar que niñas como Andy, que apareció el año pasado en Contacto, deban cambiarse de colegio por tener un carné que no corresponde a su identidad. Conocemos un caso de otra niña de siete años que ha pasado por siete colegios antes de encontrar uno donde aceptaran su identidad”, cuestionó.
Desde OTD Chile, una de las organizaciones que presentó el proyecto hace más de tres años, la decepción por el nuevo traspié de la ley se hizo sentir. «Pienso que este país no es capaz de hacerse cargo de que vivimos en un Estado laico y nadie tiene la fuerza de decir que cada uno puede creer en lo que quiera, pero ante cuestiones que son individuales, que tienen que ver con Derechos Humanos, no hay más espacio para dudar. Nos parece vergonzoso», explicó Franco Fuica, vicepresidente.
A la vez, el activista señaló que la comunidad trans vuelve a quedar en la indefensión y en la falta de reconocimiento tras el nulo avance de la ley.
«Todavía hay que buscar la buena voluntad del hospital, del consultorio, del colegio o lugar de trabajo, para poder vivir. Las personas trans no tenemos derecho a todos los espacios, tenemos que buscar que alguien quiera admitirnos en un colegio o trabajo, porque no tenemos las mismas oportunidades que el resto», señaló.
A la vez, señalaron que esperan que el trámite de cambio de identidad de género sea simple y administrativo también para los niños. «No podemos dejarlos afuera porque justamente las discriminaciones más duras que se viven son en esa etapa. Muchos de ellos comienzan a vivir su género como lo sienten desde pequeños y no podemos decirles sabes que, no, vuelve a ser como te dijeron que tenías que ser«, cerró.
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