Organización de nativos en Colombia emitió un comunicado en apoyo a pueblos originarios de Ecuador por la lucha en contra de las medidas económicas neoliberales que pretenden aplicarse en el país
La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) se solidarizó con las agrupaciones indígenas que protestan en Ecuador contra las últimas medidas económicas del presidente Lenín Moreno, denominadas «paquetazo», que incluyen la eliminación del subsidio a los combustibles.
«La ONIC saluda la valerosa lucha del pueblo ecuatoriano y, en especial, de nuestras organizaciones hermanas (…) que ejercen su legítimo derecho a la protesta frente a las medidas económicas que vulneran a los sectores populares y ponen en grave riesgo a las comunidades indígenas, al avanzar en la explotación de sus territorios», señaló la organización en un comunicado.
La ONIC también rechazó «el uso desmedido de la fuerza y la represión contra las manifestaciones», lo que calificó como «una grave violación de Derechos Humanos, de la cual es responsable el Gobierno de Lenín Moreno».
Por último, ese colectivo indígena colombiano dijo a sus pares de Ecuador que «no están solos» en la lucha contra las medidas adoptadas por el Gobierno, e hizo un llamado a la comunidad internacional para que se garantice la integridad de los manifestantes, así como al levantamiento del Estado de Excepción declarado por Moreno.
Mientras, el Gobierno de Iván Duque rechazó lo que denominó «intento desestabilizador» para con la administración de Moreno, a quien le expresó su respaldo en un comunicado conjunto de Argentina, Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala, Perú y Paraguay.
En el texto, los siete países expresaron también «su firme respaldo a las acciones emprendidas por el presidente Lenín Moreno para recuperar la paz, la institucionalidad y el orden, utilizando los Instrumentos que le otorgan la Constitución y la ley». Moreno sostiene que las movilizaciones son promovidas por el expresidente Rafael Correa (2007-2017) y por el líder venezolano Nicolás Maduro para desestabilizar a su Gobierno.
Ecuador es escenario desde la semana pasada de fuertes protestas contra las últimas medidas económicas del presidente Moreno, lo que llevó a que el lunes la Asamblea Nacional le pidiera al Poder Ejecutivo en un comunicado la apertura del diálogo con los movimientos indígenas y con todos los sectores sociales que se unieron a las protestas para buscar una «solución pacífica».
Moreno decretó estado de excepción para frenar a grupos que acusa de actos violentos, saqueos y destrozos, y ordenó el traslado temporal de la sede del Gobierno a la ciudad de Guayaquil (oeste). El mandatario aseguró que no dará marcha atrás con las medidas «porque lo correcto no tiene matices».
Por su parte, el expresidente Rafael Correa rechazó este martes las acusaciones que le hace la administración de Moreno y reiteró que es necesario solucionar la crisis con elecciones anticipadas.
Cortesía de Sputnik
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