Insulza llegó a Honduras para demandar restitución de presidente depuesto

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, llegó este martes a Tegucigalpa en un avión de la Fuerza Aérea brasileña, para entregar a los golpistas el acuerdo de la organización que exige la reposición inmediata del presidente Manuel Zelaya como presidente. En tanto el presidente de facto, Roberto Micheletti (en la foto), endureció la represión a las organizaciones sociales que exigen el retorno del orden constitucional.

Insulza sostendrá reuniones con miembros de la Corte Suprema de Honduras, miembros del parlamento y representantes de sindicatos y agrupaciones sociales. Insulza aseveró este jueves en una rueda de prensa desde Georgetown, capital de Guyana, sede de la Trigésima Reunión de los jefes de Estado de la Comunidad del Caribe (Caricom), que “no vamos a Honduras para negociar”.

No está prevista una reunión entre el presidente de la OEA y el designado presidente golpista, Roberto Micheletti, ya que la comunidad internacional no le reconoce como gobernante.

El golpe de estado fue perpetrado este domingo por sectores conservadores, el mismo día en que el presidente Zelaya había convocado a una consulta para ver si en las elecciones de noviembre próximo se podía poner una cuarta urna para que los hondureños definieran la realización de una Asamblea Constituyente.

El derrocamiento de Zelaya fue condenado por toda la comunidad internacional. Países latinoamericanos y europeos llamaron a sus embajadores a consulta esperando el   restablecimiento del orden constitucional.

El miércoles la OEA dio un ultimátum de 72 horas al gobierno de facto de Micheletti para que reponga a Zelaya en el poder.

REUNIÓN CON ORGANIZACIONES SOCIALES

Se contempla que Insulza esté en Honduras hasta esta noche. En su apretada agenda sostendrá reuniones con los cinco candidatos presidenciales de la jornada electoral prevista para el 29 de noviembre próximo.

En tanto el gobierno golpista intensificó las medidas represivas para contener las multitudinarias manifestaciones que desde distintas provincias del país marchan a la capital en apoyo a Manuel Zelaya. El gobierno de facto mantiene suspendidas las garantías constitucionales y extendió el estado de sitio a todo el país.

Los partidarios de Zelaya marchan y realizan protestas en las calles de Tegucigalpa, exhibiendo pancartas que dicen “Queremos a Mel (Zelaya)  o “Gorilas retírense del poder”.

“El pueblo no puede permitir un golpe de Estado y Manuel Zelaya debe regresar al poder”- dijo a Efe Sara Durán, contadora pública.

En tanto, partidarios del golpe de Estado se han reunido frente a la casa presidencial, con carteles de apoyo Micheletti, quien encabezó la movilización diciendo que “Esto no es un golpe, esto no es un golpe”.

El Ciudadano