La justicia indígena de varias comunidades del Cauca en Colombia sentenciaron a dos integrantes del grupo guerrillero Ejercito de Liberación Nacional (ELN) a 8 años de prisión y 38 fuetazos, por la detonación de artefactos explosivos con fines terroristas.
Según el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), los implicados reconocieron haber recibido órdenes de los altos mandos del grupo guerrillero para detonar estos explosivos en conmemoración del aniversario número 54 de la organización.
En asamblea extraordinaria, se determinó también la quema de 209 cartuchos de fusil, 2 kilogramos de pólvora negra, una granada de fragmentación, dos celulares de alta gama, tres estopines eléctricos, ropa de intendencia militar y la destrucción del armamento con maquinaria industrial.
En presencia de organismos internacionales y de más de 1.500 personas presentes en la asamblea, la cual duró más de cinco horas, los milicianos aceptaron la responsabilidad de los hechos que se imputaron.
Entre sus acciones también se encuentra la instalación de banderas alusivas al ELN y la elaboración de grafitis en diferentes puntos de la carretera entre Corinto y Santander de Quilichao, al sur de la región del Cauca.
Legislación indígena
Según la reseña publicada por el diario El Tiempo, la sentencia carcelaria se cumplirá en una de las instalaciones del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec). En tanto, el castigo de los latigazos se cumple en el marco de las costumbres de estas comunidades.
Las autoridades indígenas manifestaron que su justicia indígena también se aplicará a integrantes de la Fuerza Pública que accionen armas en sus territorios.