Mientras el sábado 10 de enero los medios se concentraban en las marchas en Paris, el grupo Boko Haram en Baga, Nigeria, perpetró la masacre de 2 mil personas en uno de sus más feroces ataques contra población civil indefensa. Se sospecha que Arabia Saudita financia indirectamente a los nigerianos, tal como hace con los extremistas chechenos, talibanes y los rebeldes sirios.
Las últimas informaciones, obtenidas a través de imágenes satelitales, dan cuenta de que en las localidades en el noreste de Nigeria aproximadamente 3 mil 700 edificios fueron dañados o incluso completamente destruidos tanto en Baga como en Doron Baga, pueblos a la orilla del Lago Chad en Nigeria, luego de que combatientes de Boko Haram atacaron la ciudad y las aldeas cercanas dispararon indiscriminadamente contra la población civil.
Según Amnistía Internacional, se estima que hubo más de 2 mil personas muertas en los ataques del 3 de enero, aunque el gobierno nigeriano dice que solo fueron 150. Dijeron que estas cifras son parte de una campaña de desprestigio por las próximas elecciones a celebrarse el próximo 15 de febrero.
Como relata uno de los sobrevivientes de la masacre para el periódico The Guardian, fue el horror. Yusuf Sarkin soltó la mano de su aterrorizado hijo de 10 años de edad. Su único pensamiento era llegar a las orillas del Lago Chad, pero cuando llegó al agua –donde los residentes en pánico se agrupaban en botes–, miró hacia abajo para notar que su hijo había desaparecido.
“Nadie lo ha visto. Creo que tengo que aceptar que está muerto, en este momento mi mente se confunde, pero cuando me regresa la fuerza, pienso que tengo que ir a otro lugar y empezar de nuevo. Es lo único que puedo hacer ahora”- contó Sarkin.
El año pasado, alrededor de 27 nigerianos murieron cada día por la violencia relacionada con Boko Haram, ahora la primera marcha para las víctimas de Baga está siendo organizada en París.
Nigeria es el país más poblado de África, aunque tiene muchísimo petróleo, casi el 60% de los habitantes vive con menos de 15 pesos al día. La corrupción impregna todo el aparato estatal, frenando el desarrollo del país y provocando un sentimiento de frustración de los nigerianos.
La lucha armada es parte del tejido nacional de Nigeria, en algún momento de su historia fue la alternativa para adquirir y defender el poder político. Para facilitar el proceso de democratización en Nigeria, se estableció un sistema de reparto de poder en regiones: Ibadán (Nigeria Occidental), Kadún (Nigeria del Norte) Benin (Nigeria Central y del Oeste) y Enugu (Nigeria del Este).
ISLAMISMO RADICAL
Boko Haram, que significa “la educación occidental es un pecado” y que también se conoce como Jama’atu Ahlis Sunna Lidda’awati wal Jihad, opera con una ideología islamista radical. Este grupo armado apareció por primera vez en el estado de Borno, al norte de Nigeria en 2002, fue creado por el experto en el Corán (mulá) Mohamed Yusuf, sus miembros al principio se consideraban talibanes.
Yusuf conocía del hartazgo de la gente hacia la clase política, por lo que siempre predicó un discurso basado en la fortificación del islam como medio para luchar contra la corrupción: si la sharía era aplicada, la corrupción sería eliminada. Boko Haram identificaba la corrupción con la perversa influencia occidental que estaba consiguiendo destruir el Estado gracias a un sistema judicial cobarde e ineficaz.
¿Cuál es la ideología de Boko Haram?
Por una parte, rechazan la educación y los valores occidentales los cuales consideran corruptos e impuros y afirman que sus actividades terroristas tienen el objetivo de derrocar al gobierno actual, abolir la Constitución e instaurar la ley islámica (sharía) como un código absoluto. Esta ley musulmana define cómo debes comportarte en la vida, las cosas permitidas o prohibidas, es decir, lo que distingue al bien del mal.
Durante casi siete años (desde 2002 hasta 2009), Boko Haram propagó su discurso por todo el norte de Nigeria. Las tensiones acumuladas entre fuerzas de seguridad y militantes de Boko Haram estallaron en 2009, provocando una ola de violencia en Bauchi, Borno, Yobe y Kano. El Gobierno desplegó a sus tropas dejando un saldo de más de 700 elementos muertos. En las semanas posteriores Mohamed Yusuf fue arrestado por el ejército y ejecutado junto a sus seguidores; las imágenes de su cadáver fueron difundidas por la televisión local.
El grupo se reorganizó, para aparecer un año después con Abubakar Shekau como su nuevo líder, quien se comprometió a vengarse, así que retomó sus actividades violentas, entre ellas el ataque a una prisión en Bauchi de la que lograron escapar unos 700 presos. Desde entonces, los atentados de Boko Haram no han hecho más que crecer en intensidad, frecuencia y crueldad.
Human Rights Watch estima que en los últimos cinco años, más de 3,000 personas han sido asesinadas, sin contar la última masacre. Los militantes han hecho parte del noreste de Nigeria ingobernable. Esto no quiere decir que el grupo controla el noreste de Nigeria; más bien, el gobierno de Nigeria y sus fuerzas de seguridad no han podido evitar los ataques contra objetivos civiles y gubernamentales.
¿CÓMO OPERA BOKO HARAM?
Boko Haram se hizo famosos cuando secuestró a más de 200 niñas en una escuela en abril del 2014. Los secuestros iniciaron en mayo de 2013, cuando Abubakar Shekau, anunció en un video que estos serían parte de su más reciente campaña sangrienta. Secuestraron a algunas mujeres y niñas para reemplazar a sus esposas y para que hagan tareas domésticas y ofrezcan servicios sexuales, según los grupos de activistas. Los secuestrados iniciarían una nueva vida como “sirvientes”.
Abubakar Shekau, nació en la villa Shekau, en la frontera con Níger. Estudió con un clérigo y asistió a la Universidad de Estudios Islámicos y Legales de Borno, por eso es llamado Darul Tawheed (experto en Allah).
El máximo órgano de toma de decisiones del grupo es conocido como el Consejo de la Shura, que cuenta con unos 30 miembros y tiene el mando sobre varias células del grupo. Aunque esta estructura hace que sea difícil definir el tamaño real de Boko Haram, la mayoría de las estimaciones, se cree que está integrado básicamente de varios cientos de personas, excluyendo el gran número de etnias motivadas a participar en ataques o proporcionar otras formas de asistencia.
Debajo del Consejo de la Shura están separados por área de responsabilidad y especialización táctica: atentados suicidas, secuestros, investigación, selección de objetivos y vigilancia. También construyen artefactos explosivos, explosivos con objetivo, robo de coches para su uso en ataques, reclutar y entrenar a nuevos miembros. Boko Haram también cuenta con varios departamentos de apoyo que se centran en el bienestar de sus miembros: una comisión médica que se ocupa de las necesidades de salud de los miembros y sus familias y un departamento de comunicación que es responsable de la comunicación y la propaganda externa.
En un principio, el grupo simplemente atacaba estaciones de policía, patrullas de seguridad y cárceles, liberando a muchos presos, pero ahora ataca a otros objetivos, como iglesias, ataques suicidas y vehículos explosivos. Boko Haram ha sido capaz de poner en marcha de forma esporádica operaciones a través de las fronteras de Nigeria en Camerún, Chad y Níger. Sin embargo, estas incursiones se han limitado a las zonas fronterizas y lejos de las fronteras con ciudades del extranjero.
Los ataques de las últimas semanas en Baga y en unos mercados, en los que usaron niñas para detonar explosivos, han llamado la atención internacional sobre la crisis una vez más.
FINANCIAMIENTO DEL GRUPO
Boko Haram tiene apoyo directo de su base en Kanuri, estado al noreste de Nigeria y una organización de caridad londinense recauda fondos para Boko Haram: Al-Muntada Trust Fund es el nombre. También genera ingresos y se abastece de manera indirecta con otros grupos armados quienes comparten entre ellos recursos económicos y armamentísticos así como técnicas de entrenamiento común de militantes.
El grupo supuestamente ha ganado millones de dólares por robar bancos. La extorsión por secuestro también es una importante fuente de ingresos. Lo más indignante es que el grupo recibe apoyo financiero directo de los políticos nigerianos. De hecho, los embajadores de Nigeria, senadores y gobernadores han sido implicados en la prestación de varios cientos de miles de dólares al mes a Boko Haram.
Miembros del gobierno federal, los gobiernos estatales del noreste, las fuerzas de seguridad y los militares supuestamente simpatizan y apoyan a Boko Haram. Y la sospecha de que Arabia Saudita financia indirectamente a los nigerianos, tal como hace con los extremistas chechenos, talibanes, rebeldes sirios.
Un flujo de ingresos mucho más grande proviene de otras organizaciones islamistas. Los grupos extremistas como Al Qaeda en el Magreb Islámico y las organizaciones de recaudación de fondos como el World Islamic Call Society o el Al-Muntada al-Islami pueden haber transferido hasta $70 millones de dólares a Boko Haram.
Los fundamentalistas islámicos proporcionan a Boko Haram otras formas de apoyo como capacitación de Al Shabaab y Al Qaeda. Lo que el grupo no compra ilegalmente lo adquiere después de atacar a las fuerzas de seguridad del Estado.
ELECCIONES PRESIDENCIALES EL PRÓXIMO MES
Nigeria celebrará elecciones presidenciales y legislativas el 14 de febrero de 2015, el futuro de la contrainsurgencia está en manos de los votantes nigerianos. Si el presidente Goodluck Jonathan es reelegido para un nuevo mandato, la campaña de Boko Haram se intensificará. Paradójicamente, Boko Haram prohíbe a los musulmanes participar en cualquier actividad asociada con Occidente. Esto incluye votar en elecciones, vestir camisas y pantalones y recibir una educación no islámica.
Si Jonathan gana, la violencia duraría hasta 2019, aún no está claro quién es el candidato presidencial de oposición, se escucha el nombre del General Muhammadu Buhari, que dirigió Nigeria 1983-1985 y ha buscado la presidencia de Nigeria en las últimas tres elecciones. Si Buhari queda como presidente es probable que pueda surgir un movimiento contrainsurgente.
Nigeria se diluye en una gran inestabilidad en la que los milicianos de Boko Haram encuentran cada vez más facilidades para consumar atentados, mientras el mundo sigue indiferente.
@plumasatomicas vía Sopitas
Edición de El Ciudadano