El Consejo para la Transparencia acogió un amparo por denegación de acceso a la información deducido en contra de la alcaldesa de San Pedro de Atacama, Sandra Berna, por no transparentar los detalles de un proyecto de discoteque presentado a la municipalidad por el primo del senador Fulvio Rossi, Mauricio Ciocca, emprendimiento que competiría con uno similar que tenía en mente el desaparecido guía Kurt Martinson.
Los documentos fueron solicitados por El Ciudadano con el fin de recoger antecedentes sobre una de las aristas que indaga el fiscal Raúl Marabolí en torno a la posible intervención de terceros en la extraña desaparición del ex empleado del Hotel Alto Atacama, ocurrida hace más de siete meses.
En sesión del Consejo Directivo del CPLT, celebrada el 12 de junio pasado, se estableció que “la solicitud en análisis no fue respondida dentro del plazo legal indicado” y que la municipalidad “no acompañó la totalidad de los antecedentes solicitados por el reclamante, relacionados con el proyecto de don Mauricio Ciocca Barraza… que obran en poder de la reclamada” (Rol C428-15).
Por esta razón, el organismo dio un plazo de 10 días hábiles para entregar la documentación respectiva, lo que de no cumplirse podría derivar en un sumario administrativo de parte de la Contraloría General de la República, que según el artículo 46 de la Ley de Transparencia sanciona con multas y cese de funciones a los alcaldes que oculten información de carácter público.
Recordemos que Mauricio Ciocca, empresario gastronómico dueño de varios restoranes de San Pedro, fue encontrado muerto en su casa en lo que la Fiscalía determinó preliminarmente como un suicidio motivado por “razones económicas”, el pasado 12 de mayo, mismo día en que la PDI registraría su morada bajo las órdenes del persecutor Raúl Marabolí.
Esto ocurrió, además, a poco más de una semana de que Ciocca fuera interrogado sobre su proyecto de discoteque y varias publicaciones anónimas compartidas en redes sociales que lo vinculaban con supuesto tráfico de drogas y la desaparición de Kurt Martinson, nexo que la familia del empresario descartó en un comunicado enviado a la prensa el día después de su muerte.
Entrevistada en enero de este año acerca de una posible arista narco en el caso Martinson, la alcaldesa Sandra Berna reconoció a El Mercurio de Calama que “la comuna es un pasadizo, donde las bandas de narcotraficantes ingresan droga al país”.
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